El vigués se presentó en el escenario sin atrezzo ni elementos de apoyo y semidesnudo. Realizó un número de danza moderna, con acrobacias propias de un gimnasta y contorsionismo de enorme dificultad. Todo ello con la ayuda de una música lenta y que contibuía a la estética de la actuación, tan sencilla como complicada con el artista como único elemento.
El número de David Pereira convenció al jurado y al público presente en la sala que le dedicó una sonora actuación. No obstante, no tuvo tanta repercusión lejos del plató porque los telespectadores optaron por la cantante Cristina Ramos en sus votaciones. Fue la ganadora del evento y el artista formado en el Flic Flac se quedó con una actuación para el recuerdo y el reconocimiento del jurado.
Eva Hache, en la particular porra realizada unas semanas antes, apostaba por Pereira para el triunfo final mientras que Jorge Javier Vázquez, que en otros momentos se mostró crítico con algunas actuaciones, aprovechó la intervención para pronunciar un discurso lleno de elogios. «Eva Hache usa siempre la palabra belleza para describir lo bello, y eso es lo que tú haces», indicó el presentador y añadió que «tenemos que hacer fuerza para que, viéndote, no nos aparezca una lágrima».
David Pereira reaccionó en twitter al expresar que «España, ha sido un placer! Me quedo con vuestro cariño, y apoyo. Siempre queriendo ganar y sabiendo perder». El artista reside en Alemania donde desarrolla su trayectoria profesional tras formarse como gimnasta en el club Flic Flac vigués. Posteriormente, pasó por Canarias hasta llegar al centro de Europa. Tras su paso por Got Talent podrían aparecerle oportunidades laborales al sur de los Pirineos. En las pantalla dejó números artísticos diversos y una actuación final llena de talento y dificultad.