Los delitos tuvieron lugar en la propia ciudad olívica y en Ponteareas, O Porriño, Redondela, Moaña, Vilaboa, Fornelos de Montes y Soutomaior. En algunos casos también se pudo comprobar que sustraían herramientas y maquinaria.
Las investigaciones llevadas a cabo en el marco de la denominada ‘Operación Caldox’ se iniciaron el pasado mes de marzo al tener conocimiento de un importante robo que se había cometido en la obra de un edificio público que se estaba construyendo en Soutomaior, de donde se llevaron material por valor de 90.000 euros.
Los investigadores determinaron que los integrantes de esta banda estaban organizados en dos grupos. Uno de ellos, integrado por cuatro personas, eran los encargados de llevar a cabo los robos que planificaban y ejecutaban según las demandas que recibían del otro grupo de receptadores, que estaba formado por seis personas.
El ‘modus operandi’ empezaba por establecer una estrecha vigilancia de las empresas de transporte o de las obras donde pretendían llevar a cabo el robo, que la mayor parte de las ocasiones tenía por objetivo la sustracción del gasoil de los camiones o de la maquinaria, según los casos.
El asalto lo realizaban posteriormente durante la noche y sustraían la mayor cantidad posible del carburante que encontraban en los depósitos de los vehículos. Cabe señalar a modo de ejemplo que en uno de los casos investigados, concretamente en un grupo de empresas de Redondela, en una sola noche se apropiaron de cerca de 1.000 litros de carburante.
Detenciones
La explotación de la operación se inició el día 29 de octubre con las detenciones de los dos principales autores materiales de los robos. Se trata de dos vecinos de Redondela y Vigo, con amplios historiales delictivos, en cuyos domicilios se recuperaron algunos objetos sustraídos y parte de las herramientas que utilizaban para la comisión de los robos.
Dos días después, en O Porriño, fueron detenidos en sus domicilios los seis integrantes del denominado grupo de receptadores. Se realizaron tres registros donde se encontraron tres depósitos ilegales, de 1.000 y 3.000 litros de capacidad, que contenían restos de gasoil bonificado del tipo B destinado para el uso agrícola e industrial, 40 garrafas de 25 litros cada una, de las que utilizaban para el transporte y una bomba eléctrica portátil, preparada para extraer el gasoil de los depósitos de los vehículos.
Entre los efectos encontrados en los registros, también se recuperaron algunas herramientas que habían sido sustraídas en la empresa de mantenimiento de la autopista AP-9.
Concluyó la operación con la detención de otros dos vecinos de O Porriño, como integrantes del grupo que participaba en la ejecución de los robos.
Asalto fallido
En el transcurso de la investigación se tuvo conocimiento de que los cuatro autores materiales de los robos, que fueron detenidos, habían estado controlando los movimientos y costumbres de un vecino de O Porriño para abordarlo y retenerlo dentro de una furgoneta. Con este plan, que no se llevó a cabo por causas ajenas, pretendían sustraerle a esta persona las llaves de su domicilio y entrar en la casa para robarle el dinero y las joyas.
Las investigaciones llevadas a cabo por el Grupo de Patrimonio de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil de la Comandancia de Pontevedra fueron tuteladas por la Fiscalía del Área de Vigo y por el Juzgado de Instrucción número uno de Redondela que decretó el ingreso preventivo en prisión de uno de los cuatro autores materiales y la libertad con cargos del resto de los detenidos.
En el despliegue operativo llevado a cabo para realizar las detenciones y los registros, participaron distintas unidades de la Guardia Civil en esta provincia: Unidad de Seguridad Ciudadana de Comandancia (USECIC), Patrulla Fiscal y Fronteras (PAFIF) y el Grupo de Información y Análisis de Tráfico (GIAT), del Subsector de Tráfico de la Comandancia.
