La sección quinta de la Audiencia Provincial de Pontevedra ha condenado a dos acusados a las penas de 7 años y 4 años y 9 meses de cárcel, respectivamente, por haber robado a un matrimonio a punta de cuchillo en su domicilio de Vigo, al que accedieron después de hurtarle las llaves a la mujer.
Según se recoge en la sentencia, el tribunal considera probado que, en la tarde del 28 de julio de 2019, los acusados se encontraban en la terraza de una cafetería, donde coincidieron con una mujer, con la que estuvieron consumiendo bebidas alcohólicas.
Los procesados se ganaron su confianza para sonsacarle datos sobre su patrimonio y sobre su domicilio y, en un descuido de la mujer, le hurtaron las llaves del bolso. Horas después, los dos acusados junto a otro varón (también encausado inicialmente pero ya fallecido) se presentaron en el domicilio, abriendo con las llaves, con las caras ocultas por pasamontañas y esgrimiendo cuchillos.
En la vivienda se encontraban la mujer y su marido, que fueron amenazados para desvelar dónde guardaban el dinero y las joyas. Uno de los sospechosos incluso puso el cuchillo en el cuello de la señora, mientras que otro empujó a su marido cuando éste trató de defenderla. Finalmente, los ladrones huyeron con varias joyas.
Posteriormente, y por medio de una tercera persona, vendieron una de las gargantillas y una medalla de oro de las que habían sustraído. Con todo, el tribunal no considera probado que el autor de esa venta fuera conocedor de la procedencia ilícita de las joyas.
Delitos y penas
La Audiencia considera a los dos acusados autores de un delito de hurto en concurso medial con un delito de robo con violencia e intimidación haciendo uso de medio peligroso, así como dos delitos de lesiones, y entiende que concurre la circunstancia agravante de uso de disfraz, así como la de reincidencia, ya que ambos procesados tienen antecedentes por robo.
Por todo ello, condena a uno (multirreincidente) a 7 años de cárcel y al otro, a 4 años y 9 meses de prisión; asimismo, impone a cada uno de ellos multa de 360 euros, y ambos deberán indemnizar a la mujer en 1.737 euros y al hombre en 90 euros.
