Los plazos en una obra pública «los carga el diablo». Son muchos los altos cargos y responsables políticos que han utilizado esta expresión en más de una ocasión pero, sin embargo, siempre los acaban dando públicamente llegando a incumplirse en ciertos casos por múltiples motivos.
Es lo que ha pasado con el jugoso contrato de obras para urbanizar el segundo polígono de Navia. Un procedimiento que se inició en julio del pasado año 2024 cuando se publicó la licitación de la obra por un importe de casi 16,4 millones de euros y que, tras un año de trámites -con presentación de recurso ante el Tacgal incluido-, parece que sale adelante siendo la adjudicataria de la obra, finalmente, la UTE que recurrió el proceso y que está conformada por las empresas Ferrovial y Ogmios.
Esto es lo que ha llevado a no poder cumplirse los plazos de inicio de obra dados inicialmente por la Administración -se hablaba del mes de marzo, primero, y mayo, después-, teniendo así, al menos, un retraso de cuatro o cinco meses hasta que las máquinas entren por fin en el terreno.
Y es que tras la segunda resolución de la mesa de contratación -la primera recayó en la constructora de Ourense Petrolam SL– se estaba a la espera de la formalización del contrato pero, en el camino, el proceso se volvió a suspender por segunda vez hace un mes: el pasado 16 de junio.
Sin embargo, la semana pasada, el 15 de julio, se levantaba dicha suspensión para dar paso, al fin, a la formalización del contrato, que se hizo pública este mismo lunes, 21 de julio.
Así, por un importe de 14.642.048,17 euros, la UTE Ferrovial Construcción y Ogmios Proyecto se ha hecho cargo, de forma oficial y como bien publica la Xunta de Galicia, con el contrato. Y tras ello, y si no hay nuevos imprevistos, tienen un plazo de un mes para poder entrar en la parcela e iniciar las obras de forma real.
Otros contratos
Con todo, en la Consellería de Vivenda, resta ahora también por formalizar el contrato relativo a la dirección de obra y vigilancia ambiental que, por un importe de 273.460,00 euros, se adjudicó a la consultora Proyfe.
Ya están formalizados los contratos relativos a los servicios de control de calidad de las obras y de coordinación de seguridad y salud. El primero, por un importe de 178.086,52 euros, se lo llevó la consultora Eptisa mientras que del segundo se hizo cargo la empresa Agora Ingeniería por un importe de 30.939 euros.
De este modo, ya queda menos para que el inicio de las obras de urbanización del segundo polígono de Navia sean una realidad teniendo en cuenta la apuesta que la Xunta de Galicia ha hecho por este desarrollo residencial en Vigo y que, sumado a las obras del primer polígono supondrá la creación de un total de 16.000 viviendas públicas.
Obras en el polígono 2
Así, las obras en el segundo polígono de Navia afectan a una superficie total de 106.361 metros cuadrados, donde se prevén un total de 719 viviendas, todas protegidas, en dos fases. En la Fase A, con 44.538 metros cuadrados, se prevé construir 337 viviendas, y en la Fase B, con 61.823 metros cuadrados, otras 382 viviendas.
En cuanto a la dotación de aparcamientos, para el conjunto del polígono 2 se proyectan 311 plazas de aparcamiento público y 10 para personas de movilidad reducida, correspondiendo 180 (6 PMR) para la Fase A y 131 (4 PMR) para la Fase B. En esta zona también se levantará el IES Domingo Villar, que la Xunta acaba de sacar también a licitación con el compromiso de intentar iniciar las obras este mismo año.
Los trabajos de la urbanización, con un plazo total de ejecución de 17 meses, son los relativos a movimientos de tierra y pavimentación, señalización de vías y semaforización, red de abastecimiento, red de saneamiento de aguas residuales, pluviales, instalación de energía eléctrica, iluminación, gas, telecomunicaciones, accesibilidad, jardinería y equipamiento urbano, a imagen y semejanza de los que ya se hicieron en el primer polígono y que, con una inversión de 14,3 millones de euros, acaba de rematar la UTE Ramírez-Dragados.