El Bloque Nacionalista Galego (BNG) ha reclamado reforzar el control de acceso de vehículos en la peatonal de O Calvario. El frente nacionalista ha reclamado por parte del gobierno local de Vigo una mayor vigilancia habida cuenta de las denuncias vecinales que alertan de un aumento de coches en este espacio a pesar de las limitaciones y prohibiciones para circular.
El portavoz municipal del BNG de Vigo, Xabier P. Igrexas, ha reivindicado la peatonalización de O Calvario como una de las “mayores transformaciones” en la ciudad en el camino de avanzar en la democratización del espacio público para devolver las calles a las personas. Una medida que, remarcó, ha permitido ganar en seguridad, sostenibilidad y calidad de vida.
Precisamente, fue un alcalde nacionalista, Lois Pérez Castrillo, el que propuso el reto de suprimir la circulación en este último tramo de la calle Urzaiz, entre Gregorio Espino y Martínez Garrido. Las obras comenzaron en el año 2002 y se prolongaron durante un año y medio y, aunque inicialmente se planteó dejar un carril para la circulación, finalmente la restricción de vehículos fue completa, limitando el acceso rodado a las transversales.
“No podemos permitir que la dejadez y la falta de atención por parte del gobierno de Caballero nos haga retroceder”, defendió Igrexas ante el incremento de vehículos que “invaden” esta calle peatonal.
En particular, reclama reforzar el control en la confluencia de la calle Aragón con Urzaiz, así como mejorar la señalización y la seguridad peatonal en el entorno de las calles Toledo, Extremadura, Cataluña y León.
Con motivo del Día Mundial del Peatón –que se celebró este pasado domingo 17 de agosto– el BNG ha pedido dar pasos para vivir en un Vigo con “más espacios abiertos, seguros y limpios, con el mínimo nivel de ruido y contaminación, con más vegetación y llenos de vida”, recogiendo propuestas de organizaciones como la ‘Red de Ciudades’.
Un objetivo que, manifiesta el BNG, permitirá también avanzar hacia una ciudad más descarbonizada, combatiendo de este modo los efectos de la situación de emergencia climática que padecemos.
Extender el modelo del Calvario
El portavoz municipal nacionalista puso como ejemplo a actuación en O Calvario hace más de dos décadas, y ha apostado por extender este “modelo de éxito” a más ámbitos.
“En el BNG demostramos que otro modelo de ciudad, con las personas en el centro, más verde y segura, era posible además de necesario”, afirmó Pérez Igrexas, llamando a “construir un nuevo Vigo en el que la ciudad deje de ser de los coches para ser de todas las vecinas y vecinos”.