El comité de empresa de Vitrasa, concesionaria del bus urbano de Vigo, ha rechazado la oferta de la empresa de adelantar 500 euros por trabajador, a cambio de desconvocar las jornadas de huelga de 24 horas previstas hasta el 26 de mayo, por considerar la propuesta “insuficiente” y porque la empresa “se niega a negociar reivindicaciones de tipo social”.
En un comunicado, el sindicato CIG, que preside el órgano de representación de los trabajadores, ha señalado que la intención de Vitrasa era pagar 500 euros por persona en la siguiente nómina, que les serían descontados de la futura subida salarial que se pueda acordar, una cantidad que ven “irrisoria”, y que supondría un desembolso de 180.000 euros a una concesionaria “que está reclamando al Ayuntamiento casi 31 millones”.
El comité mantiene que el nuevo convenio debe incluir una actualización de sueldos en base al IPC acumulado desde que caducó el anterior marco regulador (6,5% en 2021, y 5,7% en 2022). “Además la dirección pretende cerrar el conflicto y seguir negociando más adelante, sin atender las reivindicaciones de tipo social”, han añadido fuentes sindicales.
Por todo ello, mantendrán la huelga y las movilizaciones, que continuarán el próximo lunes con una marcha a pie desde las instalaciones de la empresa a las 07.45 horas hasta la Praza de España. El martes trasladarán las protestas a la puerta del ayuntamiento a las 10.30 horas, para seguir reclamando al alcalde que se implique en el conflicto.
Posición de Vitrasa
Por su parte, la empresa concesionaria ha lamentado que el comité haya rechazado la “paga de 500 euros netos” para cada trabajador ofrecida como “medida conciliadora”, para recuperar el “correcto funcionamiento” del servicio y poner fin a la huelga. “Con esta actitud, el comité demuestra una vez más su desconexión con la realidad que está viviendo la empresa, que lleva 3 años acumulando pérdida de viajeros (…) y que está a la espera de resolución del expediente de reequilibrio económico”, ha añadido Vitrasa en un comunicado.
Además, la empresa ha denunciado que la oferta trasladada no ha sido sometida a la asamblea, del mismo modo que no se sometió a asamblea la decisión de pasar de los paros parciales (que sí fue votada por la plantilla) a los paros de 24 horas.
Finalmente, también ha lamentado que el comité se ha “negado” a aceptar su oferta de mantener, desde el próximo 22 de mayo, reuniones semanales con la Comisión de Horarios y Líneas “para cerrar un diagnóstico, así como medidas necesarias para mejorar los tiempos de descanso de la jornada”.
