La entrada de una masa de aire cálida africana sobre Galicia traerá este lunes y buena parte de la semana un aumento importante de las temperaturas, tanto las máximas como las mínimas, que superarán holgadamente los 30 grados.
Ya para esta jornada de lunes, se ha establecido aviso amarillo por temperaturas superiores a los 34 grados en la zona del Miño de Pontevedra y en Baiona el mercurio alcanzaba ya los 25,1 grados a las 9:00 horas de la mañana. Vigo, por su parte, arrancaba a primera hora de la mañana con 22 grados tras una noche en la que la mínima se quedó en los 18,5 grados y tras alcanzar el domingo una máxima de 28,19.
Y el martes la alerta se extenderá a buena parte del litoral gallego, con aviso amarillo en las Rías Baixas por temperaturas superiores a los 34 grados, mientras que será naranja en la cuenca del Miño, tanto en Pontevedra como en Ourense, donde podría superar los 36 grados.
Tan solo se librará de la alerta por altas temperaturas el norte de la comunidad gallega, donde por otra parte hay alerta por mar de viento desde este lunes.
De hecho, la combinación de viento moderado, que soplará del noreste, con las altas temperaturas ofrece un riesgo elevado para los incendios, y prueba de ello es que este lunes ya han surgido varios focos en la comarca de Vigo, a primera hora.
Buena parte de Vigo, de hecho, se ha despertado con olor a humo y una ligera neblina procedente de pequeños incendios forestales próximos, como los registrados este lunes en Pedrabuxiña (Salceda de Caselas) o Tomiño.
Este domingo, en Lalín se registró el primer incendio de la temporada estival, con 3,5 hectáreas quemadas. El fuego pudo ser controlado desde última hora de la pasada tarde, según han informado fuentes de la Consellería do Medio Rural.