El Consorcio Casco Vello de Vigo (CCVV) continúa en firme con su proceso de rehabilitación integral de la zona antigua de la ciudad. Tras obtener todos los ‘beneplácitos’ de las administraciones consorciadas -Xunta y Concello- y tener ya asegurada una inversión de casi 8 millones de euros, siendo 7,1 procedentes de fondos autonómicos para ejecutar el nuevo Plan de Actuación 2026-2030, el organismo ya empieza a dar sus pasos en firme con las primeras y nuevas intervenciones previstas para los próximos cuatro años.
Así, el comité ejecutivo que se celebró esta semana aprobó el proyecto básico de ejecución de su próxima promoción en las parcelas de la rúa Alta 8-10-12 y 14 y que, como bien avanzó este periódico, supondrá la construcción de cinco nuevas viviendas de dos y tres dormitorios, siendo dos de ellas de tipología dúplex con jardín privado.
De este modo se avanza en el que será el primero de los proyectos que estrenarán la nueva etapa del Consorcio, pendiente también de formalizar con la protocolaria firma del convenio entre ambas administraciones responsables de la marcha del organismo, presidido por la delegada de la Xunta en Vigo, Ana Ortiz.
De hecho, desde el Gobierno gallego pretenden la organización de un acto dentro de unos días que estaría presidido por el máximo responsable del Ejecutivo autonómico, Alfonso Rueda, en pleno barrio histórico y con el objetivo también de conmemorar el 20 aniversario del CCVV. Sin embargo, la reciente negativa del alcalde Abel Caballero para oficializar el convenio con la Diputación de Pontevedra por la piscina de Teis no presagia buenos resultados a los planteamientos iniciales.
Sea como fuere, esta cuestión protocolaria no debería empañar el futuro rehabilitador y la firma final del convenio de colaboración que permitirá la renovación de la sexta prórroga del Consorcio acordada con el gobierno local.
Y así se llevarían adelante las actuaciones previstas en el total de los 45 inmuebles contemplados dentro del Plan de Actuación hasta 2030. Y en él se encuentra la propuesta en firme para la rúa Alta, la primera también que el organismo ejecutará en dicha calle, muy próxima a Elduayen y Porta do Sol.
La actuación
El proyecto está firmado por el arquitecto Javier Vázquez Fernández y, finalmente, contará con un presupuesto de ejecución de 1.427.958,87 euros tras la aprobación llevada a cabo en el órgano ejecutivo del CCVV.
Las cinco viviendas -al igual que el resto de actuaciones residenciales promovidas por el Consorcio serán bajo la tipología de Viviendas de Protección Autonómica (VPA) a precio concertado.
Se construirán sobre la agrupación de cuatro solares ya adquiridos en diciembre del año 2021 y el edificio resultante contará con cinco viviendas distribuidas en cuatro plantas (bajo más tres alturas) que se completarán con un jardín privado y patio interior con el objetivo de que entre iluminación natural.
La primera de ellas, la única con dos dormitorios ya que todas las demás tendrán tres, ocupará la planta baja y tendrá una superficie aproximada de 90 metros cuadrados.
Mientras, las plantas primera y segunda acogerán cada una de ellas una vivienda de unos 113 metros cuadrados, en tanto que en la tercera se crearán dos residencias, una de 93 y otra de 70 metros cuadrados de superficie útil. Todas ellas tendrán trastero.
Distribución del nuevo complejo
En detalle, la distribución del nuevo inmueble ofrecerá un área de sótano, donde se ubicarán los armarios de instalaciones y trasteros.

En la planta baja, además del portal de acceso, con escalera y ascensor, se configura una de las viviendas más ‘apetitosa’ y llamativa ya que tendrá 104,90 metros cuadrados de superficie construida, a los que se sumarán casi 23 m2 de jardín privado.
De hecho, se proyecta como una vivienda «que ofrece un programa de tres estancias» con dos dormitorios y que «se apoya en la cualificación espacial» de dos jardines -de «carácter seco o japonés», especifica el proyectista- que estarán situados entre el piso y la calle pero «garantizando» las exigencias de privacidad.
Esto, unido al otro pequeño jardín – patio interior ubicado en la zona posterior del futuro complejo residencial permitirá «una mayor riqueza del espacio habitable de la vivienda». Se completa con dos baños, vestíbulo-recibidor, sala de estar con comedor y cocina así como sala de almacenaje y zona de lavadero y tendedero.

Mientras, en las plantas 1ª y 2ª se proyectan sendas viviendas por planta con tres estancias y dos dormitorios de características similares pero que, como se matiza en el documento proyectado, «permiten la opción de generar una cuarta estancia: sala polivalente, estudio, segundo estar o nuevo dormitorio».
Serán de los pisos más amplios con 132,10 m2 de superficie construida además de disponer de varios balcones. Y su distribución se completa también con dos baños, vestíbulo-recibidor, sala de estar con comedor y cocina, sala de almacenaje, zona de lavadero y tendedero así como la posibilidad de una sala «polivalente».

En la planta tercera se desarrollarán las dos viviendas tipo dúplex que se complementarán con los espacios del bajo cubierta.
Así, la vivienda 3ºA en dúplex, será la más grande ya que tendrá cuatro estancias con tres dormitorios en una superficie construida total que llegará a los 107,20 m2, a los que se sumará el espacio del patio interior (7,10 m2). Se completará con vestíbulo-recibidor, dos baños, sala de estar, comedor, cocina además de zona de almacenaje y lavadero.
Mientras, la vivienda 3ºB será más pequeña pero mantendrá la esencia de las dos plantas de la tipología dúplex. Eso sí, contará con un dormitorio y tendrá una superficie total construida de 81,70 metros cuadrados. Un baño, un aseo, vestíbulo-recibidor, sala de estar-comedor y cocina además de zona de lavandería completarán el ‘coqueto’ piso.

Y como curiosidad en estas dos viviendas, se marca que la zona baja de los dúplex se ofrece al exterior «con un volumen acristalado a modo de galería para recoger el máximo de luz y siguiendo las indicaciones del Pepri», según reza el proyecto.
Zonas comunes y «grieta» para iluminar
A las viviendas se accederá desde un volumen central, en el que se establece el portal, las comunicaciones verticales y los espacios comunes. Pero el diseño marca que dicho acceso estará «iluminado por una pequeña “grieta” en las plantas baja, 1ª y 2ª o patio -en planta 3ª- que se abrirá al exterior por encima de la edificación colindante».
Esta solución permitirá la entrada de iluminación natural y ventilación cruzada, con el objetivo de, como apunta el arquitecto redactor del proyecto, servir de «rótula y transición» entre los dos volúmenes laterales que están situados a dos cotas ligeramente diferenciadas.

Por último, detalla que las viviendas que se desarrollan en una sola planta, la zona de noche y de servicios se sitúa en el volumen de la izquierda mientras que la zona de día se localiza en el volumen de la derecha, proyectándolo así como «un gran espacio de uso y distribución flexible casi a modo de ‘loft’ o gran espacio sin tabiquería».
Esto es lo que permitiría dicha polivalencia en algunas estancias que, en algún caso, se podrían «llegar a separar» ofreciendo la posibilidad de nuevas estancias en los pisos de las plantas 1ª y 2ª.






















