Por Asunción Maus, secretaria general de SATSE Galicia.
Las enfermeras y fisioterapeutas que trabajamos en el Servizo Galego de Saúde volveremos a comprobar, este mes de junio, cómo los “comepagas” vuelven a despedazar nuestro reconocimiento retributivo.
Una vez más, y ya van 30, los profesionales que trabajamos en la sanidad pública no cobraremos la integridad de nuestra paga extraordinaria, y, una vez más, perderemos en torno a 350 euros. Al año, por tanto, unos 700 euros.
Un dinero que nos corresponde y que no podremos utilizar para hacer frente a algunos de los gastos habituales de cada hogar y que son cada vez más elevados. Ya hemos perdido la cuenta de cuanto ha subido en los últimos años la factura de la luz o del gas, el alquiler de una vivienda o el precio del aceite o cualquier otro producto de primera necesidad.
La explicación la encontramos si nos remontamos a 2010. Eran tiempos de crisis y el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero estableció este recorte, al igual que la reducción de nuestros salarios, como una medida extraordinaria y temporal. Pasaron los años, y también los Gobiernos, y la situación sigue igual.
Mariano Rajoy no hizo nada y ahora Pedro Sánchez tampoco. Ni él ni su vicepresidenta y ministra de Hacienda, María Jesús Montero. Todos ellos, además de los partidos políticos, han permitido que las sucesivas leyes de Presupuestos Generales del Estado no posibiliten volver a cobrar la paga extra en su totalidad.
Da igual que nuestra economía lleve años creciendo, da igual que lideremos, en estos momentos, el crecimiento en la zona euro, da igual que sí se destinen ingentes cantidades de recursos económicos a otras finalidades más que cuestionables si lo que buscamos es el interés general.
Además se está vulnerando el Estatuto Marco del personal estatutario de los servicios de salud y el Estatuto Básico del Empleado Público (EBEP).
A ellos les da igual, pero a nosotros no. Desde SATSE venimos reclamando nuestro derecho a reconocer nuestro trabajo tal y como tiene que ser, y no vamos a dejar de presionar a gobiernos y partidos para que acaben con esta injusta y discriminatoria realidad.
Ahora, y bajo el lema “De nuestra extra, que no se coman ni un euro”, enfermeras y fisioterapeutas nos concentramos en los centros alzando nuestra voz para que nuestros responsables públicos reaccionen, de una vez por todas, y cumplan con la ley y con nuestra profesión.
A la Xunta de Galicia y la Consellería de Sanidade le pedimos que no sean cómplices de esta expropiación ilegítima, escudándose en que no es de su competencia, y que presione también al Ejecutivo central.
No vamos a permitir que se quieran seguir haciendo fotos con nosotros para vender en los medios de comunicación lo buena que es su sanidad y sus profesionales y que luego nos arrinconen y minusvaloren nuestro trabajo.
Somos profesionales que, como el resto, queremos ver reconocido lo que hacemos como corresponde, que no se coman ni un euro.