Los animalistas señalan que especies como la felina poseen una enorme capacidad reproductora, pudiendo multiplicar su población exponencialmente en pocos años y suponiendo un problema de gasto público superior, por lo que con un presupuesto de 20.000 euros se podría esterilizar a más de 160 gatos evitando miles de crías durante el mandato, a lo que se sumaría la esterilización de 125 perros en el mismo periodo de tiempo.
Esta propuesta no es novedosa y ya se aplica en el Ayuntamiento de Cádiz desde comienzos de año en colaboración con el Colegio Provincial de Veterinarios, aunque esta política pública se ha generalizado en ciudades sudamericanas como ejercicio de control poblacional, con ejemplos de interés como Montevideo, Bogotá o Medellín, donde además tiene un componente social, al centrar parte de las ayudas en familias con pocos recursos.
Libera subraya que una política continuada de esterilización animal contribuye positivamente al abandono, con un menor número de perros y gatos dejados a su suerte por culpa de una minoría que, además de irresponsable, delega en el conjunto de la ciudadanía una problema de recogida, rehabilitación y manutención de animales hasta el momento de su adopción.
Los defensores de los animales estiman que cada abandono ‘cuesta’ a las administraciones públicas una media de 300 euros y a través de una política de esterilización se previenen futuros casos por una cantidad que fluctúa entre los 60 y los 80 euros de precio tasado con los profesionales veterinarios.
