«Lo que me dicen muchos compañeros es que para lo poco que he jugado se me quiere bastante. Yo siempre dije que podría jugar mejor o peor, pero iba a salir siempre al campo a dejarme los huevos en cada balón, que ya me podrían salir las cosas mejor o peor, pero por ganas no iba a ser», dijo Aspas.
El moañés, si finalmente se queda en el Sevilla, tendrá como compañero a Michael Krohn-Dehli, con el que ya coincidió una temporada en el Celta. Se deshace en elogios hacia el danés: «Es una buena persona y un buen futbolista, que tiene mucha versatilidad y se desenvuelve en varias posiciones. Puede dar muchas soluciones, en ataque sobre todo».
Por otra parte, Aspas reconoce que le hubiera gustado jugar más minutos: «Ha sido una buena temporada en lo colectivo, aunque no en lo individual, porque un futbolista es egoísta y quiere jugar lo máximo posible, pero sabía la competencia que había aquí, ahora no queda otra que descansar y aspirar a jugar más minutos la temporada que viene. Sí, es cierto que he jugado siete u ocho partidos titular y he metido 10 goles, pero los compañeros han jugado muy bien. Se ha ganado un título, se ha quedado quinto con la mejor puntación de la historia y quitar a un compañero por otro cuando se está bien es mucho más difícil. Si yo estuviera jugando pensaría lo mismo».
Unai Emery ha renovado y seguirá ocupando el banquillo del Sevilla. La relación de Aspas con su técnico ha sido complicada, pero el futbolista no cree que la permanencia de Emery le cierre las puertas de la titularidad en un futuro. De hecho, espera comenzar esta campaña de cero. «Es un punto a favor no solo para mí, sino para otros compañeros que han jugado menos. Empezar a trabajar, coger el ritmo de partidos, el ritmo de entrenamientos… eso me vendrá muy bien», explicó.
