“Cuando hay predisposición por ambas partes todo es más fácil”, apunta Prades sobre su reciente renovación. A pesar de que las conversaciones se iniciaron hace semanas, no ha sido hasta hace escasas horas cuando técnico y club han cerrado finalmente el acuerdo de continuidad.
Casi una mera formalidad, ya que el cuerpo técnico lleva diseñando el proyecto de la próxima temporada, tal y como confiesa el mismo José Ignacio, bastante tiempo: “A pesar de que la renovación se hace oficial ahora, llevamos ya un par de meses trabajando en la confección de la plantilla del próximo año”.
La filosofía será la de cada año, hacer todo lo posible por mantener el bloque y en caso de que haya bajas “suplir las carencias con un fichaje del mismo nivel o incluso superior”. A día de hoy, serían “dos o tres piezas” las necesarias para dar por completado el grupo 2018-2019.
En lo deportivo poco quedaba por definir y, a pesar de que “todo suma”, el plano personal tomaba mayor importancia en el caso de Prades: “Tanto mi familia como yo nos sentimos muy queridos en A Guarda, muy integrados y arropados. Para mí es primordial que ellos estén bien”.
Con la tranquilidad de poder olvidar por unos días el futuro y centrarse en el presente, José Ignacio Prades dirigirá por segunda vez al Guardés en el camino hacia la Copa de la Reina. De momento, en dos años (la segunda temporada todavía con dos títulos posibles), el técnico se ha hecho en A Guarda con un título liguero, una plaza semifinalista en la Copa 16/17, un debut en la Supercopa de España y en la Liga de Campeones.
