José María López Sanfeliu, para la mayoría de los mortales Kiko Veneno, guarda tanta música en sus dedos que no le hace falta entregarse al máximo, mucho menos utilizar el ‘playback’ o dar gritos sobre el escenario. Para un gaditano no debe ser fácil cambiar las chirigotas de su Carnaval por la molesta «poalla» viguesa. Él aguantó la desapacible noche con oficio, con buen humor y con buena parte de su extraordinario repertorio.
No fue el concierto de su vida, no vamos a engañarles, ni tampoco será especialmente recordado por los 300 fieles que desafiaron las inclemencias, pero el espectáculo de la noche anterior le abría de par en par las puertas del cielo. Rumba, flamenco, pop… una recopilación de sonidos al alcance de muy pocos músicos españoles.
Diez minutos antes de la hora prevista para que comenzase la actuación de Kiko Veneno y la Banda del Retumbe, la Porta do Sol era un auténtico desierto de losetas. Lluvia «mollabobos», de esa que duele y destroza paraguas, pusieron en peligro el segundo concierto del Entroido, pero como por arte de magia (seguro que andaluza) hubo una tregua.
«Lo que me importa eres tú» fue el tema escogido para presentarse ante el público. A partir de ahí, todo un catálogo de sus grandes éxitos con sus álbumes «Está muy bien eso del cariño» (1995) y «Puro Veneno» (1998) como principales protagonistas. «Te echo de menos», «Menphis blues», «Veneno», «Dime A», «Lobo López»… un placer para los oídos.
«Gracias por aguantar con nosotros»
Frotándose las manos para combatir el frío, el músico también hizo un recorrido por su amplia discografía, más de una docena de discos, para empatizar con los vigueses. «La vida es dulce, a pesar de la lluvia, a pesar de la crisis», dijo para presentar el tema de «Sensación Térmica» (2013) . Poco a poco el ambiente se calentó y Kiko Veneno brindó a «todas las mujeres» su «Fuego».
«Muchas gracias por aguantar aquí con nosotros», reconoció cuando la lluvia arreciaba y se vio obligado a dar unos pasos atrás para esquivar las gotas que amenazaban su guitarra. Como cierre «Joselito», sin duda el tema más aplaudido y, a petición de los presentes, dos bises, «Esperanza» y «Satisfacción».
De poco sirvieron los esfuerzos del público para conseguir otro regalo y la llamada de la Orquesta Filadelfia, con su propio escenario en la Praza de Princesa, puso fin al paso del músico andaluz por el lluvioso Entroido de Vigo. Solo una pega, un concierto de Kiko Veneno sin «Volando voy» ni su «Mercedes blanco»…
