Acaba 2025 y basta mirar al cielo en la noche viguesa (más leds que estrellas) para saber que ya estamos en Navidad. Una época en la que comprar regalos se convierte en una mezcla de alegría y dolorosa esclavitud.
Como todos los años, vamos a intentar aligerar la búsqueda de regalos aportando algunas novelas gráficas publicadas este año, que pueden ser un presente más que perfecto.
‘Rose en la isla’, de Michel Rabagliati con traducción deRubén Lardín (Astiberri)
Empezamos con cómic que no es cómic. Rose en la isla(Astiberri) supone la nueva entrega de la vida cotidiana de Pau, el personaje que ha crecido de la mano de Michel Rabagliati.Ahora Pau y su hija Rose alquilan una casa de verano en Isla Verde, en la región canadiense del Bajo San Lorenzo.

Para Pau son un descanso tras momentos difíciles que le llevan a esta bucólica isla en compañía de su descendencia. En esta inflexión argumental Rabagliati vira igualmente como autor, y abandona el formato clásico del cómic para firmar su primera novela ilustrada.

Con matices, pues hay pequeños toques estratégicos de cómic en sus páginas, y en general el ritmo, panorámico, perfectamente pautado por las imágenes, sigue teniendo mucho de narrativa dibujada. En todo caso, sea lo que sea este libro, Rose en la isla transpira paz.
‘En vela’, de Ana Peñas (Salamandra Graphic)
En vela es posiblemente una de las obras que va a ocupar puestos importantes en las listas de lo mejor de este 2025.

Una novela gráfica de factura exquisita, ánimo visual experimental y narrativa sorprendente que, a partir de un protagonismo coral, analiza la sociedad contemporánea.

El diagnóstico es claro: los insomnios abundan y las causas de la falta de sueño residen en las imperfecciones de nuestra sociedad. Un relato quizá crudo pero necesario, porque nos hace pensar el mundo que nos estamos haciendo.
‘El caso David Zimmerman’, de Lucas y Arthur Harari con traducción deRubén Lardín (Astiberri),
Una suerte de thriller sobrenatural construido sobre un armazón argumental quizá típico, pero de eficaz enganche. Su narrativa, pese a tratarse de autores franceses, bebe en gran medida del cómic independiente norteamericano ya canónico (Seth, Daniel Clowes).

La historia de un intercambio de cuerpos —inexplicable e inexplicado— entre un hombre, el protagonista, y una misteriosa mujer funciona como McGuffin para que el damnificado emprenda, desde el cuerpo de ella, una búsqueda de sí mismo, aunque sea a través de otra identidad física y sexual.

‘Encías quemadas’, de Natalia Velarde (Reservoir Books)
Un tour de force de formato lujoso y acabado impactante. Una historia absorbente, onírica y mágica que, pese a sus elementos fantásticos, acaba hablando de un dolor muy personal. Unos personajes antropomórficos emprenden un a búsqueda libérrima y verborréica.

La narración fluye sin ataduras, no se sujeta a modas y formas habituales sino a una impronta personal, fogosa y torrencial. Todo con una técnica pictórica y mixta (usa recursos infográficos que no oculta). Impactante, por encima de todo.

‘DC Black Label. Zatanna: Abajo la sala’, de Mariko Tamaki y Javier Rodríguez con traducción deGonzalo Quesada(Panini).
Este libro supone posiblemente el mejor cómic de superhéroes publicado en 2025. Una refundación de un personaje del universo DC relativamente minoritario (no es Batman ni Superman, precisamente) que, en manos de Tamaki y Rodríguez, se convierte en un tebeo burbujeante, lleno de fantasía, humor e imaginación.

Una fantasía superheróica recomendable para todas las edades. Obtener el Premio Eisner a la Mejor Serie Limitada en 2025 puede haber tenido su peso en el hecho de que el libro esté agotado. Panini ha anunciado su reimpresión para estas fechas.

‘Una invitada en casa’, de E. M. Carroll con traducción deInga Pellisa Díaz (Sapristi)
Carroll, fiel a su obra previa, propone un relato nuevamente de horror de inspiración victoriana. Aunque parte de una clásica historia de fantasmas, la autora le da una oportuna vuelta de tuerca (nunca mejor dicho).

Las casas encantadas y sus fantasmas tan etéreos como amenazantes —material literario de primer orden, desde Henry James hasta la tradición japonesa del kaidan— se convierten aquí en una alegoría sobre asuntos tan íntimos como universales: la pérdida y los miedos contemporáneos. El verdadero terror gótico del s. XXI.

‘Café romántica’, de Simon Hanselmann con traducción de Alberto García Marcos y César Sánchez Rodríguez (Fulgencio Pimentel).
Hanselmann nos devuelve (¿nos regurgita?) la necesaria dosis de miserable vida cotidiana de sus míticos personajes Megg, Mogg y Búho. Se trata de una recopilación de historias cortas dispersas por el universo fanzinero del autor, con el añadido de varios relatos inéditos.

Volveremos así a reencontrarnos con jóvenes perdidos, adictos tanto a sustancias prohibidas como a dejar a la vida caerse por los sumideros. Una radiografía del hastío del s. XXI en clave de humor vitriólico. Si no conoces la saga, este es buen momento para acercarte a ella.

‘Black Metal’, de Magius (Autsaider Cómics).
Si lo tuyo es el heavy, Black Metal, de Magius (Autsaider Cómics), es una compra obligada. El autor murciano construye un escrupuloso documental en viñetas sobre el black metal noruego y los siniestros sucesos que lo rodearon (desde la quema de iglesias hasta los asesinatos).

La imaginación de Magius, sin embargo, le da un giro inesperado al convertir a los protagonistas en niños, ofreciendo así un cuento sórdido contemporáneo que recuerda, en espíritu, a la crudeza original de los hermanos Grimm.

‘Casas extrañas’ / ‘Strange Houses’ 1, de Uketsu y Kyo Anano con traducción deDaruma Serveis Lingüístics(Reservoir Books).
Este manga es la gran nueva apuesta de la editorial por el manga ⸺avalada por más de 3 millones de copias vendidas en Japón⸺: adaptación de la novela de Uketsu (cuya identidad es un secreto, posa enmascarado), se trata de una historia de misterio y horror en torno a una vivienda de diseño incoherente, inquietante e inexplicable.

Narración clásica y planimetrías arquitectónicas de enorme peso argumental al servicio de una historia que busca, en España, a ese público fascinado por lo extraño —Stranger, sí, aunque más allá del tono intrigante y terrorífico, poco tiene que ver este manga con la famosa serie de Netflix.
‘Palindrotiras’, de José Pablo García (Autsaider).
Este libro es un experimento gozoso, juguetón, con la historia del cómic y como su título indica, con los palíndromos (palabra o frase cuyas letras están dispuestas de tal manera que resulta la misma leída de izquierda a derecha que de derecha a izquierda).

En él su autor nos habla de nuestra historia, y sobre todo la del cómic a través de viñetas tronchantes dibujadas con el estilo de incontables autores, de la portada, Herrimann, a Forges o Max, en una obra tan desternillante como ocurrente. Desde su ya lejano “Joselito” García no volvía a mostrarse tan juguetón.

‘Paracuellos’, de Carlos Giménez (Reservoir Books).
Y nos despedimos con un clásico, porque Reservoir Books ha publicado este 2025 la edición integral —“edición total”, la llaman ellos— de Paracuellos, de Carlos Giménez, posiblemente el cómic más importante de la historia del tebeo español. Giménez es un pionero que, en 1975, decidió dejar de escribir historias chispeantes para niños y niñas y reflejar en viñetas crudas las memorias de su infancia en un orfanato de posguerra.

Aquella herida cicatrizó, pero el autor sintió con los años que necesitaba seguir contando esa época, no siempre desde el dolor o el vitriolo. Con todo ello, Giménez entregó un colosal fresco, no sólo sobre la infancia desgraciada de un tiempo desgraciado, sino sobre la propia naturaleza de la niñez.



























