Galicia ronda el pico de la actual ola de la pandemia y, ante esta coyuntura, la Xunta ya contempla la posibilidad de relajar las restricciones vigentes. El presidente, Alberto Núñez Feijóo, ha avanzado este jueves que el comité clínico que monitoriza la crisis sanitaria se reunirá la próxima semana, probablemente el martes, para analizar la situación. Si los expertos autonómicos consideran que se ha alcanzado ese máximo de contagios, “lógicamente” se aliviarán las limitaciones implantadas con motivo de la Navidad.
Aunque los informes epidemiológicos conocidos el martes y el jueves constataron sendas caídas de la incidencia acumulada en 14 días, el repunte reportado en el parte del miércoles todavía alimenta las desconfianzas en el seno de la Xunta. Feijóo considera que “aún es pronto” para concluir que se ha llegado a ese pico de la ola, una afirmación que contrasta con las previsiones lanzadas por el conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, quien refrendó sus pronósticos esta misma semana. Así, el mandatario gallego ha instado a ser “cautelosos” y esperar al martes 25 de enero.
En todo caso, se ha comprometido a “dejar sin efecto parte o todas las restricciones” si se confirma la llegada a ese pico. Asimismo, ha reivindicado que las medidas introducidas en diciembre –como reducción de horarios en la hostelería y el ocio nocturno, cierre de barras o tope de comensales por mesa- son “mínimas”.
Sobre la situación epidemiológica, ha calificado de “constante y notoria” la mejoría en la detección de contagios nuevos, pero ha avisado de que la evolución “no es homogénea” en todo el territorio. Por ejemplo, el área sanitaria de Vigo todavía no ha experimentado ninguna caída en su incidencia acumulada en 14 días ni en los casos activos, algo que sí ha sucedido en otras zonas de Galicia. Por ello, pidió ser “prudentes” y “no aprobar la ‘gripalización’ de la Covid-19 por decreto”.
