UGT ha convocado para este viernes, día 1 de agosto, una concentración frente a la sede de la Xunta en Vigo para demandar medidas que garanticen la seguridad de las trabajadores de los servicios de ayuda en el hogar tras el crimen de O Porriño (Pontevedra).
En un comunicado, el sindicado ha mostrado su repulsa por la muerte de esta empleada del SAF de dicha localidad cuando estaba realizando su trabajo en una vivienda. Así, ha anunciado una protesta para pedir protección para estas trabajadoras.
«No se puede volver a repetir este suceso. Las empresas y las administraciones tienen la obligación de preservar la seguridad y la salud de las trabajadoras del sector en su centro de trabajo», ha reivindicado UGT.
Precisamente este jueves, la diputada provincial del BNG Manuela Rodríguez ha pedido al área de Igualdade de la Diputación de Pontevedra que inste a las empresas del Servizo de Axuda no Fogar (SAF), a los ayuntamientos y a la Xunta a suspender los servicios de manera cautelar cuando se detectan casos de acoso.
En un comunicado, los nacionalistas han reivindicado la importancia de proteger a las mujeres que cuidan a los ancianos y «no priorizar el servicio por encima de la salud».
«Para honrar la memoria de Teresa no sirven de nada minutos de silencio. Lo contrario, hacen falta gritos de denuncia y acciones encaminadas a que no se repitan situaciones de riesgo para las mujeres de ningún servicio de ayuda en el hogar», ha subrayado.
Todo ello tras la muerte violenta de Teresa, una trabajadora del Servizo de Axuda no Fogar (SAF) de O Porriño, a manos, presuntamente, del marido de la anciana a la que cuidaba, que padece una enfermedad mental. El varón fue detenido el martes en la casa donde se produjeron los hechos, siendo trasladado a la Unidad de Psiquiatría del Cunqueiro, donde permanece.
Este jueves la familia de Teresa le ha dado el último adiós a la víctima, pidiendo respeto para poder despedirse en intimidad.