La Universidad de Vigo sigue avanzando en los trámites para solicitar el Grado de Medicina y este lunes el Consello de Goberno ha decidido no votar el acuerdo de descentralización de docencia alcanzado con el resto de universidades gallegas y con la Xunta, un acuerdo que, para el rector, Manuel Reigosa, está «muerto» tras el ‘no’ de la Universidad de Santiago.
El órgano de gobierno de la universidad viguesa se ha reunido este lunes en sesión extraordinaria para votar el acuerdo alcanzado entre las tres universidades y la Xunta, que recogía plazos para la descentralización de la docencia de los cursos 4º y 5º (el 6º ya es impartido en hospitales de toda Galicia). Sin embargo, el propio rector ha explicado en la reunión que «no procede votar el punto del orden del día porque la USC no se sumó al acuerdo». «Y no procede que nosotros nos sumemos a un acuerdo rechazado por la USC», ha señalado.
Así las cosas, el rector olívico ha confirmado que la institución académica seguirá avanzando en la tramitación del Grado de Medicina, una tramitación que comenzó el pasado 17 de octubre, cuando se presentó la declaración de interés.
Reigosa ha señalado que el acuerdo alcanzado, que se había comprometido a defender ante el Consello de Goberno, «llega muerto porque la USC no se sumó», y ha recordado que la universidad santiaguesa ha aplazado ‘sine die’ la votación por el rechazo contundente de la Facultad de Medicina.

«No nos dejan otra salida»
«Vamos a seguir dando pasos para la creación del Grado y la Facultad», ha subrayado, y ha lamentado que no haya servido el «trabajo duro» de negociaciones entre las tres universidades para llegar a ese acuerdo de descentralización. «Aposté por la descentralización, pero no nos queda otra que pedir el título (…) no nos dejan otra salida», ha añadido, antes de advertir de que «hay un acuerdo que había que defender, y si no valía, había que haberlo dicho y no presentarlo en público».
Sobre la posibilidad de que, finalmente, la USC decidiese aprobar el acuerdo, Manuel Reigosa ha explicado que lo propondría para aprobación del Consello de Goberno, pero ha advertido de que, si se quiere volver a abrir la negociación para deshacer los acuerdos cerrados, la UVigo no dará «más vueltas». Así, Reigosa se ha mostrado dispuesto a volver a sentarse, pero ha insistido: «No me vale que nos quiten los pilarres del acuerdo alcanzado».
Al respecto, ha prometido «estudiar con cariño» un posible acuerdo de la USC semejante al alcanzado, pero ha insistido en que volver a un pacto de descentralización en diez años es una «pantalla ya superada».
Tramitación del grado
El rector ha recordado que, en todo caso, y paralelamente a la negociación del acuerdo, la UVigo ha estado trabajando para pedir ese Grado, y se constituyeron dos comisiones, una para redactar el plan de estudios y otra formada por asesores externos expertos.
Según ha explicado, la institución tiene hasta el 27 de febrero de 2026 para finalizar la memoria inicial y hasta el 27 de marzo para la evaluación y remisión del informe técnico. El paso final, será la aprobación de la memoria definitiva y elaboración del informe de respuesta a las alegaciones, para enviar la documentación posteriormente a la Consellería de Educación (antes del inicio de junio próximo).
Durante ese proceso deberán recabarse informes, entre otros organismos, de la Secretaría Xeral de Universidades y de la Consellería de Facenda, antes de la aprobación por el Consello Galego de Universidades. «No tenemos garantía de que nos vayan a aprobar el título y la facultad, pero tenemos que tener la documentación preparada», ha explicado Reigosa.

Coste de la titulación
El rector ha cifrado en unos 12,5 millones de euros al año el coste de la implantación del nuevo grado de Medicina, de los que el 40 % deberían ser pagados por la propia UVigo; y el coste del profesorado para un centenar de alumnos de 1º a 6º curso.
Con respecto a las instalaciones, Reigosa ha recordado que, en su día, existió un proyecto para construir una ‘vela’ extra en el Hospital Álvaro Cunqueiro, que podría albergar el grado de Medicina, además de Enfermería.
«Tenemos los mimbres»
La comisión redactora del plan de la titulación está formada por el vicerrector de Titulacións e Innovación Docente, Alfonso Lago, y los catedráticos de la UVigo, África González (Inmunología) y Federico Mallo (Fisiología), además de profesores de las áreas de Anatomía y Embriología Humana, Lenguajes y Sistemas Informáticos, Neumología y Cirugía.
La comisión asesora está integrada por personas experto en Medicina Interna, Cardiología, o Dermatología, así como dos exdecanos de Medicina.
La catedrática África González ha explicado, en declaraciones a Europa Press, que la UVigo lleva un tiempo trabajando en la preparación de la memoria para reclamar Medicina, con la ventaja de que «no se empieza desde cero». «Tenemos los mimbres», ha subrayado, en referencia a los hospitales, y a los recursos humanos (profesores de áreas como Fisiología, Enfermería, Biología o Ingeniería Biomédica, y más de un centenar de doctores).
África González ha confirmado que este trabajo se está desarrollando con el horizonte puesto en la próxima primavera, con la intención de que el grado pueda implantarse «cuanto antes mejor», y con la vista puesta en el curso 2027-2028.
En ese sentido, ha recordado que la implantación de un Grado en Medicina reviste gran complejidad porque se trata de una profesión «muy reglada» y «con unos requisitos muy estipulados».
Reunión en Santiago
Mientras, este lunes el rector de la USC, Antonio López, ha mantenido una reunión con integrantes de la Junta de la Facultad de Medicina, en la línea avanzada el pasado viernes de establecer una «vía de diálogo» para conseguir que se adhieran al pacto.
Fuentes consultadas por Europa Press aseguran que el plan de la universidad compostelana continúa siendo aprobar el acuerdo lo antes posible, a poder ser, en las próximas semanas.






















