Vigo se ha convertido esta mañana en un vibrante plató televisivo. En medio del frenesí prenavideño, que combina la instalación de su ya célebre iluminación y el trajín de miles de personas atraídas por la llegada de un gran crucero, el popular presentador y showman Xuso Jones se encuentra grabando las nuevas entregas del concurso «Lo Sabe, No Lo Sabe» para Mediaset. El ajetreado centro vigués, con sus calles desbordadas por turistas y locales, se revela como el escenario perfecto para un programa de calle que bebe de la espontaneidad ciudadana.
Xuso Jones, de fenómeno viral a estrella de la televisión
Aunque Xuso Jones dio sus primeros pasos en el mundo del espectáculo como cantante, alcanzando la fama inicial a través de un vídeo viral, su trayectoria se ha consolidado como la de un comunicador polifacético y carismático.
Dotado de una energía contagiosa y una simpatía natural, Jones ha sabido transitar con éxito desde la música y las redes sociales hasta la televisión y el pódcast.
Su éxito se fundamenta en su capacidad para conectar de forma genuina con el público, tanto en formatos grabados como en directo. En el ámbito digital, copresenta el exitoso pódcast «Poco se habla!» junto a Ana Brito. Recientemente, el showman ha dado el salto definitivo a las grandes citas televisivas: Xuso Jones será el encargado de presentar las Campanadas de Fin de Año de 2025 en un tándem estelar junto a Sandra Barneda, retransmitiendo el evento para Cuatro y Telecinco.

El corazón del concurso: ¿Quién sabe la respuesta?
El programa que Jones graba en Vigo, «Lo Sabe, No Lo Sabe», es una revitalización de un formato de concurso callejero que busca la interacción humana y el factor sorpresa. La mecánica es sencilla pero ingeniosa: el presentador aborda a un concursante en la calle y le plantea una pregunta de cultura general. La peculiaridad reside en que la respuesta correcta no depende del conocimiento del concursante, sino de la capacidad de este para elegir, de entre los transeúntes, a la persona que cree que sí sabrá la respuesta.
Este planteamiento convierte a la ciudad en sí misma en el gran plató y en una caja de sorpresas. En el contexto actual de Vigo, con la zona portuaria y el centro bulliciosos por el movimiento turístico que genera la temporada navideña y las llegadas de cruceros, la grabación adquiere una dimensión extra, ya que el flujo constante de gente de perfiles muy diversos asegura la imprevisibilidad y el entretenimiento del formato.

Vigo como plató: luces y cruceros
La elección de Vigo para las grabaciones no es casual. La efervescencia que vive la ciudad con la instalación de sus afamadas luces de Navidad, sumada a la intensa actividad en la terminal de cruceros, crea un ambiente de trajín constante que es oro puro para un programa de estas características.
Xuso Jones y el equipo de producción se adentran en un mosaico de caras y culturas, buscando a ese ciudadano anónimo que, por intuición o conocimiento, pueda dar el sí definitivo a la pregunta planteada, haciendo de cada encuentro un pequeño espectáculo espontáneo dentro de la gran fiesta que es la ciudad gallega en esta época.


























