Hace ahora un año, a estas alturas del otoño, hacíamos recuento de los estragos que había causado a su paso el temporal Kirk, con vientos de más de 200 kilómetros por hora, vuelos cancelados, árboles caídos y un sin fin de incidencias de todo tipo, ninguna de ellas agradable. Hoy, como sucedió durante todo el fin de semana y buena parte de lo que llevamos de octubre, disfrutamos en las Rías Baixas de una nueva jornada de playa en toda regla.
De hecho, ha sido una conversación recurrente en muchas familias y grupos de amigos, y no pocas de esas charlas han tenido lugar en las playas, a donde miles de personas se desplazaron este fin de semana para disfrutar de este tiempo veraniego a deshora.
Lo cierto, aunque nos llame la atención, es que no son extraños estos días tan agradables a principios de otoño. Ni tampoco sería extraño que estuviésemos viviendo la contraria, según explica Ana Lage desde Meteogalicia: «En esta época del año puede venir una situación como la que estamos teniendo o puede venir, por el contrario, una temporada de temporales del suroeste, que es la otra cara de la moneda que podríamos tener ya perfectamente en esta época del año».
Lo cierto es que la temperatura media de lo que llevamos de otoño es de 24 grados, con picos notablemente superiores. Pero la serie histórica dice que, en 2017, por ejemplo, tuvimos una media de 24,6 con picos por encima de los 32 grados.
¿Por qué un clima tan agradable?
La explicación a este fenómeno es una configuración meteorológica en la que confluyen varios factores. En primer lugar, el anticiclón «importante, potente», que ahora mismo está situado sobre las islas británicas, «de 1.030 milibares», tal y como explica esta meteoróloga. Y es gracias a la influencia de este anticiclón que, aunque hay algo de aire frío en las capas altas, Galicia ni se entera, no como ocurre en el Levante, donde se suceden las precipitaciones localmente fuertes.
Además, a este anticiclón se une una entrada de aire cálido procedente de latitudes más meridionales, de modo que, además de días de tiempo seco y soleado tenemos también temperaturas altas para la época del año.
«Se junta además que la semana pasada comenzamos con una circulación del nordeste bastante marcada que en las Rías Baixa, la cual hizo que las temperaturas subiesen y los cielos quedasen muy limpios de nubes», no como sucedió en el noroeste de la comunicada y en la costa norte.
¿Podemos seguir yendo a la playa?
Lluvia, en principio, no caerá hasta el sábado por la tarde o tal vez hasta el domingo. Así que a la playa podremos ir casi todos los días de la semana. Ahora bien, si lo que queremos es quitarnos la ropa, el mejor día para hacerlo es este mismo lunes: hoy tendremos máximas de 27 grados.
A partir de mañana, martes, la cosa irá variando, fundamentalmente por la llegada de bancos de niebla costera, que empezaremos a notar esta misma noche. Eso afectará a las temperaturas, que caerán, aunque en las horas más calientes del día estarán sobre los 23-24 grados. El jueves subirán de nuevo, y el viernes volverán a bajar, en principio para ir dejando paso a nubes que descargarán, por fin, por nuestra zona, el fin de semana.
«De momento, la situación no es nada excepcional», dicen desde Meteogalicia. Este sol no acompaña para dar comienzo de verdad a la temporada de cocido y castañas, pero a juzgar por lo llenas que han estado las playas este fin de semana, no parece que tengamos prisa porque entre de una vez el otoño.