La Coordinadora para o Estudo dos Mamíferos Mariños (Cemma) ha hecho un llamamiento a no molestar a dos delfines solitarios, una hembra adulta y su cría, que en la actualidad se encuentran en la Ría de Arousa pero que llevan años ‘danzando’ por aguas de las Rías Baixas.
De hecho, en mayo de 2024 los delfines, de la familia ‘Tursiops truncatus’, fueron detectados en el puerto de A Guarda, desplazándose después hasta Baiona para asentarse más tarde en la zona de Arousa.
Su uso de la ensenada de Baiona fue lo que les llevó a recoger los nombres de los mismos ya que los dos ejemplares salvajes se llaman Ladeira -la hembra adulta- y Ladiña, la cachorro.
Después del verano del 2024 volvieron al puerto de A Guarda, y con la entrada del invierno se introdujeron en la Ría de Vigo, buscando aguas más tranquilas y resguardadas. Ocasionalmente fueron observados con algún otro ejemplar aunque el hecho de tener que parar a descansar les impide seguir a una manada.
Con todo, llevan casi año y medio viviendo solas por lo que Cemma solicita que «se mantenga el máximo respeto y evitar acercarse».
La Coordinadora pide especial cuidado a pescadores, navegantes o nadadores en los momentos en los que la hembra adulta se encuentra parada a descansar durante largos periodos, lo que achacan a algún tipo de enfermedad, para que no se presione al animal.