El equipo directivo del IES Valadares, uno de los institutos con mayor número de alumnos de Vigo, presentó ayer su dimisión en bloque ante Inspección Educativa y la Dirección Territorial de la Xunta en Pontevedra.
Según señalan en un comunicado enviado a los medios de comunicación, el motivo es que el centro contará el próximo curso «con un docente menos» ya que ocupará ese puesto una segunda orientadora, que el propio equipo directivo califica de «absolutamente necesaria en nuestras circunstancias».
Como explican, las aulas del centro están compuestas por grupos de 30 alumnos de los que, «aproximadamente un tercio, requiere atención muy específica«, matizando que bien es por cuestiones de trastornos de conducta, TEA, discapacidad intelectual o altas capacidades, entre otras circunstancias, y «sin olvidar», especifican, al resto del alumnado que «igualmente tiene derecho a una atención educativa digna y de calidad».
En los últimos años, desde el centro de Valadares se sumaron a múltiples programas ofrecidos por la Consellería de Educación lamentando que la formación de sus docentes y su gestión «no viene acompañado de recursos humanos sino que se nutre de voluntariado» de los propios profesores. «No podemos hablar de inclusión sin medios humanos para llevarla adelante», sentencian.
«No hay horas suficientes de apoyo, no hay atención individualizada, no se pueden aplicar todas estas adaptaciones ni hacer un seguimiento como sería deseable», esgrimen en el comunicado.
Así, intentaron trasladar esta «realidad» a las autoridades competentes, pero sin éxito. De ahí la decisión tomada: «No es posible para un docente atender de manera realista y efectiva un aula como la descrita», subraya el equipo directivo, destacando que el profesorado del IES Valadares «trabaja sin descanso formándose, implicándose y haciendo un esfuerzo enorme que ni se ve ni se reconoce». El resultado, continúan, «profesorado desbordado, familias frustradas, alumnado desatendido y un equipo directivo agotado».
A lo largo del curso que acaba de terminar, que comenzó con mucha polémica en los colegios e institutos de Vigo precisamente por la falta de profesorado especializado en la atención a la diversidad, el equipo directivo del IES Valadares informó a la Xunta «en numerosas ocasiones y con entrevistas, escritos e informes detallados» de la «falta de recursos» del centro pero, como informan, «no recibieron respuesta».
De este modo, lamentan «no poder seguir asumiendo una responsabilidad para la que nos comprometimos pero para la que no se dan los medios necesarios», por lo que decidieron presentar su dimisión.
«Es una decisión dura, pero también una denuncia, porque no queremos ser cómplices de un sistema que precariza la educación pública mientras finge que funciona bien», concluyen, reiterando su compromiso con la educación pública y con el IES Valadares, al que seguirán vinculados como docentes.
Apoyo de Foanpas: «Es una losa que aplasta el derecho de los niños»
Además, desde la Federación de Anpas de Vigo (Foanpas) mostraron su «apoyo a las personas que forman parte del equipo directivo, así como a las reivindicaciones que motivan su decisión», señalaron.
«Las buenas palabras de la Consellería no pueden tapar la realidad que se vive en los centros a menudo», consideran desde el colectivo, que lleva denunciando la falta de recursos y personal desde hace años.
«La falta de recursos es una losa que aplasta el derecho de todas los niños y niñas a una educación inclusiva«, consideran en un comunicado enviado a los medios.
Así, señalan que «seguirán luchando por alcanzar una enseñanza pública inclusiva, que respete el derecho de los niñas y niños y que dé respuesta a las necesidades de la comunidad educativa», concluyen.