El grupo municipal del BNG en el Concello de Vigo acaba de pedir la dimisión del concejal de Deportes, Manel Fernández, por ser «incapaz» de solucionar el abandono que padecen las instalaciones deportivas de la ciudad.
El partido nacionalista reclama así «actuaciones urgentes» que atiendan las numerosas quejas vecinales por el «deficiente» estado de pabellones y gimnasios municipales así como por los «continuos cierres injustificados» en los últimos meses.
«El señor Fernández está ya en una disyuntiva inevitable: o actúa y rectifica o dimite», interpeló el concejal del BNG, Filipe Abalde, asegurando que esta situación «colmó la paciencia» de las viguesas y vigueses que «no pueden seguir aguantando tanta incompetencia» al frente de la política deportiva del Ayuntamiento de Vigo.
Desde el Bloque van a solicitar la comparecencia del edil de Deportes en la Comisión Informativa convocada para el próximo lunes con dos objetivos. Por un lado, para que «ofrezca respuestas» ante las reivindicaciones de los vecinos y vecinas así como de los usuarios y usuarias y clubes de la ciudad que, como añadió el edil nacionalista, «exigen un giro de 180 grados en la gestión de las dotaciones deportivas».
Y por otro, para «reclamar que se ponga punto y final» al proceso de privatización de las instalaciones municipales, «rechazado desde el primer momento por los nacionalistas», apuntó.
El concejal del BNG enumeró así algunos ejemplos del «abandono» que presentan las instalaciones deportivas, algunas de ellas «cayendo a pedazos desde hace años haciéndolas impracticables».
«El estado ruinoso de las pistas de atletismo, la falta de iluminación en el campo de la ETEA, las deficiencias en las piscinas municipales con el cierre desde hace 3 años en Teis, y el mal estado de los pabellones, muchos de ellos con problemas estructurales y goteras», enumeró Abalde.
Cierres y privatización
Y al «mal estado» de las instalaciones, Abalde añadió la «incapacidad» del gobierno local para, incluso, llevar a cabo la apertura de gimnasios como O Carme, el Berbés o las instalaciones de Samil que, en los últimos meses, «registraron cierres alegando falta de personal para atender los recintos deportivos».
Se trata así de una situación que, a juicio del Bloque, «busca justificar una paulatina privatización del servicio, como ocurrió antes con otras dependencias municipales».
Abalde recordó que estas demandas fueron reiteradas por el propio BNG en los últimos años, entre ellas, con iniciativas como una amplia batería de enmiendas a los presupuestos municipales de este año reclamando un incremento de 770.000 euros para el mantenimiento, mejora y equipamiento de las instalaciones deportivas de la ciudad.
«A todas esas propuestas, la mayoría absolutista de Caballero dijo no», afeó el concejal del Bloque.
Devolución de cuotas
Y otra de las medidas reclamadas por el nacionalista es la «devolución de las cuotas a todas las personas usuarias» de los gimnasios del Carme, Berbés y Samil para «compensar las molestias por no poder hacer uso en condiciones».
Además, exigió que que «no se cobre ni una sola cuota más» mientras no se garantice la apertura y los arreglos en estas dotaciones deportivas. «Es un escándalo que el gobierno municipal cobre a las viguesas y vigueses por instalaciones que no pueden usar», remachó.