El alcalde Abel Caballero informó que este martes se iniciaron los trabajos topográficos para la instalación de las nuevas rampas mecánicas de Gran Vía, en el tramo entre Praza de España y Praza de América.
Una obra que el regidor calificó de «simbolismo excepcional y gran importancia». Así, según detalló, la actuación iniciada este martes permitirá cartografiar «todo el bulevar central de la calle y la acera de subida de la mano izquierda», dijo recordando que será el espacio donde se ejecutará «la implantación de las rampas y la humanización del conjunto de las aceras».
Y es que como avanzó VIGOÉ tras la licitación de la redacción del proyecto, la actuación rondará los 25 millones de euros, recordando el regidor que el pasado mes de marzo se adjudicaron los trabajos a la consultora de A Coruña, Antea Iberolatam.
Ahora, la adjudicataria comienza los trabajos topográficos para definir exactamente el proyecto. De hecho, cuenta con un plazo de seis meses para contar con un documento que «defina a nivel constructivo las obras necesarias para la rehabilitación y transformación del entorno urbano de la Gran Vía entre Praza España y Praza América y sus calles transversales, con el objetivo de mejorar la movilidad peatonal tanto longitudinal como transversal en el entorno de la Gran Vía, lo que permitirá impulsar el comercio y favorecerá la inclusión de los bienes de interés patrimonial del entorno en las rutas turísticas», según señala el expediente.
Y como insistió el regidor, el proyecto establecerá las rampas que van a ir por la medianera, respetando la estructura y los árboles del bulevar al mismo tiempo que definirá las conexiones transversales hacia Hispanidad, calle Barcelona o Zamora, a un lado, así como los enlaces con los barrios de A Salgueira y Sárdoma, por el otro.
Con todo, las rampas mecánicas supondrían una primera fase de la actuación puesto que la humanización de la avenida, con una importante reformulación del tráfico, vendría en una segunda fase e, incluso, una tercera -a futuro-, como contempla el pliego de contratación y que pasaría por la gran actuación para tratar de resolver los problemas de tráfico de la Gran Vía con un túnel entre Praza América y Praza de España.
El precio estimado de la ejecución material, 60 millones de euros adicionales a los 26 planteados para la primera fase. Para todo ello, el Concello de Vigo solicitará financiación europea de los Next Generation, que hasta ahora han permitido afrontar buena parte de las obras del Vigo Vertical.