La Gerencia de Urbanismo dará cuenta este próximo martes de la licencia de obra otorgada a sus propietarios para rehabilitar un histórico edificio del centro de Vigo, a un paso de una de las principales vías de la ciudad y donde, a día de hoy, todavía perdura uno de los locales comerciales más emblemáticos y que es todo un ‘icono’ de las máquinas de coser que hace años se fabricaban en Vigo.
El edificio del número 59 de la calle Ecuador, donde se encuentra la tienda de la empresa Alfa-Refrey, será objeto de una completa rehabilitación siguiendo el proyecto redactado por el arquitecto Juan Carlos Cabanelas Rodríguez.
Con un presupuesto de ejecución total de 787.000 euros, la obra proyectada prevé la reforma del histórico inmueble que data del año 1945, para lograr un edificio de siete plantas y bajocubierta que se distribuirán del siguiente modo: el sótano se dedicará a trasteros; la planta semisótano tendrá uso comercial vinculado a la planta baja, que será para el establecimiento además de tener el portal de acceso.
A partir de ahí, cuatro plantas en altura -con un máximo permitido de 16,50 metros- y un aprovechamiento bajo cubierta para contar con un global de 7 viviendas en una superficie total construida que alcanza los 1.254,50 m2. También se instalará un ascensor para cumplir con la normativa de accesibilidad.
De este modo, Urbanismo da vía libre a la obra de remodelación de esta vetusta edificación con 80 años de antigüedad para ofrecer renovados pisos pero, como advierten los técnicos municipales, conservando elementos patrimoniales.
Y es que, como detallan, el histórico inmueble está incluido en el ámbito del Plan Especial y Catálogo Complementario de edificios, conjuntos y elementos a conservar en Vigo (PEEC).
Según especifica Urbanismo, el edificio actual tiene fachada a la calle Ecuador pero también una fachada trasera que da a un patio de la manzana -entre los números 57 y 61- siendo un inmueble levantado entre medianeras y en el que, según el proyecto presentado, cuenta con muros de carga de perpiaños de granito y pilares de hormigón además de forjados también de hormigón, exceptuando el de la planta semisótano y el de la cubierta, que tiene estructura de madera.
Además, ambas fachadas son de perpiaño de granito, salvo los elementos volados, que están realizados en fabrica de ladrillo.
Es por ello por lo que en el proyecto se marca la conservación de la fachada principal, la trasera y los patios de piedra, en los que se llevarán a cabo las correspondientes y «necesarias labores de limpieza y rehabilitación» así como la «eliminación de instalaciones superficiales rehabilitando, en la fachada posterior, las zonas de fábrica de ladrillo, eliminando los cubre tendales y la galería de la cuarta planta», según reza en el expediente municipal.
A mayores, y en el caso de la fachada principal, se tienen que sustituir las carpinterías existentes por carpintería de aluminio lacado en color blanco siguiendo la misma modulación que las actuales. También se mantienen los forjados existentes, excepto el del techo del sótano, de la cuarta planta y de la cubierta.
Con todo, el histórico edificio, que en su bajo comercial acoge el representativo establecimiento que mantiene el símbolo de la empresa Refrey de Vigo, vivirá una transformación para contar con una remozada imagen.
La fábrica, en Bouzas
La fábrica de máquinas de coser Refrey fue puesta en marcha en 1943 por Manuel Freire Costas, siendo el nombre de la marca el equivalente a la palabra Freire escrita al revés. Sus dueños estaban vinculados con los conocidos astilleros de Bouzas y de la curva de San Gregorio.
La firma -totalmente gallega y ubicada en el centro de la villa marinera- tenía patente propia y era capaz de competir con marcas internacionales como Singer, produciendo máquinas de coser de gran calidad que se exportaban a todo el mundo.
La fábrica desapareció totalmente hace varias décadas, concretamente en el año 2007, y el enorme solar de Bouzas donde se encontraba está ocupado en la actualidad por un conjunto de modernos edificios y calles. Allí estaba la fundición para las piezas y elementos de la carcasa y el típico pie, además de la planta de montaje.
Las máquinas de coser Refrey ya forman parte de la memoria de la ciudad de Vigo y con mayor mérito al apellido Freire manteniendo -al menos por ahora- este pequeño establecimiento comercial en la calle Ecuador donde -como bien reza en su página web- se dedican en la actualidad a la venta y reparación de máquinas de coser así como a ofrecer accesorios de las mismas y muebles para cada modelo.