Una vecina de Vigo de 28 años ha sido imputada por un delito contra la seguridad vial después de que ser interceptada conduciendo una motocicleta en sentido contrario cuando además se encontraba en estado de embriaguez. Lo curioso del caso es que la joven acabó encajada en la pasarela de la noria situada junto a la Alameda y fue retenida allí por uno de los vigilantes.
Aunque la Policía Local ha informado del suceso este miércoles, los hechos se remontan a la madrugada del pasado domingo. En torno a las 03.30 horas el cuerpo municipal recibió la llamada de un responsable de seguridad de la atracción para informar de lo ocurrido y de que tenía consigo a la implicada.
Al lugar se desplazó una patrulla, que se encontró con la mujer y el vigilante. Según relató éste a los agentes, la conductora circulaba por la plaza de Compostela en sentido contrario, en dirección a la calle Areal, y se había quedado encajada en la pasarela de acceso a la noria cuando intentaba salvar ese obstáculo.
Los agentes comprobaron que efectivamente presentaba “claros síntomas de encontrarse bajo los efectos del consumo de bebidas alcohólicas” y por ello le sometieron a la pertinente prueba. Ésta arrojó un resultado positivo de 0,77 y 0,72 mg/l de alcohol por aire espirado, lo que excede el límite penal establecido.