Regades informó a Bueno sobre las gestiones que está llevando a cabo el Concello de Vigo con el Ministerio de Transición Ecológica para conseguir que apruebe la «excepcionalidad» y autorice la inversión necesaria para acometer la traída de la red de alta tensión a Vigo.
En el transcurso de una reunión en la que trataron temas como la actualización de las infraestructuras, la ampliación de la superficie del polígono de Balaídos, las mejoras del suministro eléctrico y la búsqueda de soluciones de aparcamiento tanto para la plantilla como para los transportistas, Zona Franca informó a PSA de que está manteniendo conversaciones fluidas con el Ayuntamiento para la necesaria tramitación urbanística de la ampliación del polígono y su posterior ejecución. Regades manifestó que «estas obras deben servir para integrar adecuadamente Balaídos dentro de la trama urbana».
Además, Zona Franca ha planteado a Groupe PSA distintas localizaciones para resolver el problema de aparcamientos, tanto de vehículos particulares como de los camiones que a diario entran y salen de la planta. Dichos emplazamientos serán estudiados por diferentes departamentos técnicos para elegir la solución más adecuada.
Ambos dirigentes acordaron mantener un diálogo fluido, a través de un grupo de trabajo integrado por técnicos de ambas entidades, con el objetivo de buscar las mejores soluciones que contribuyan a la competitividad de la planta de automóviles, cabeza tractora del sector de la automoción en el área de Vigo, que emplea a más de 20.000 personas.