De esta manera, el parque llega a tiempo para que los niños y niñas de la zona puedan estrenarlo durante sus vacaciones de Navidad. Las obras se iniciaron el 11 de diciembre de 2017 y estaba previsto que durarán seis meses, pero diversos problemas e imprevistos relacionados principalmente con filtraciones de agua que caían a los establecimientos situados debajo complicaron su construcción. La demora incluso supuso una sanción a la empresa adjudicataria.
Una vez superados todos los inconvenientes, el espacio ya está listo para su apertura. La remodelación, en la que se han invertido unos 760.000 euros, ha permitido que el parque crezca al eliminarse la línea de aparcamientos que había pegada a él. También se han incrementado sensiblemente las dimensiones del paso de peatones anexo, con el objetivo de mejorar la seguridad.
En las nuevas instalaciones conviven juegos para todas las edades. Una de las atracciones más llamativas, que ha sorprendido a propios y extraños, es la gran cúpula ‘de araña’ situada en el centro del parque, que tiene a su lado un largo tobogán cubierto por el que se podrán deslizar los niños.