La intervención tuvo lugar a las 23.30 horas y además del vehículo mencionado se requirió la presencia de un segundo camión de bomberos. Este tipo de actuaciones se suelen desarrollar por la noche, que es cuando estos insectos están menos activos.
Como es habitual, el nido fue introducido en una bolsa de plástico para a continuación congelarlo y acabar así con la vida de estas avispas invasoras.