La semana pasada, el Sergas anunciaba que Serunión dejará de prestar el servicio y que una nueva empresa, Arcasa, se encargará a partir del 1 de julio.
En un comunicado, CCOO recuerda que ya denunció repetidamente el mal funcionamiento de la cocina de este centro sanitario al mismo tiempo que la Gerencia lo negaba y remarca que ahora «la Gerencia ya no lo puede esconder más».
«Desde la apertura del hospital Álvaro Cunqueiro los sindicatos denunciamos repetidamente el mal funcionamiento de la cocina», remarcó María José Diéguez en un comunicado en el que lamenta «la situación que padecen tanto los pacientes como sus familiares cuando tienen que ingresar o recibir el alta hospitalaria».
Así, señala que se ha solicitado en numerosas ocasiones una reunión con la Gerencia para analizar la situación pero que sus demandas fueron desatendidas mientras se respondía que «no era cierto y que estaba en proceso de mejora». Mientras tanto, añade el sindicato en su nota, «los familiares de los pacientes ingresados acudían al hospital con tuppers llenos de comida para darle algo decente de comer a sus allegados».
En la misma línea, denuncian que las dietas no las controla ningún personal del Sergas como se había hecho hasta ahora en los centros hospitalarios de Vigo y aseguran que incluso se le negño el acceso a estos profesionales para poder controlar los aportes calóricos en las dietas servidas a niños y adultos, tan importante en patologías como puede ser una diabetes.
«Y ahora, como siempre, nos encontramos con lo de escurrir el bulto para no cargar nadie con la culpa», lamentan.
Por todo ello, denuncian de nuevo la situación actual y exigen que la cocina del Álvaro Cunqueiro se revierta de nuevo al Sergas «ya que contamos con personal profesional que realiza un trabajo de calidad desde hace muchos años, cocineras y cocineros, pinches de cocina, enfermeras y enfermeros y técnicos a los que se les impidió seguir desarrollando su trabajo en la cocina y en el servicio de nutrición para dejarlo en manos de una empresa privada», concluye el comunicado de CCOO.
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