La Policía Local de Vigo tuvo que retirar de la calzada esta pasada noche el cuerpo de un zorro que murió tras ser atropellado por un vehículo en la avenida de Arquitecto Antonio Palacios. El animal quedó tendido en el centro de la calzada tras irrumpir en ella y recibir el impacto de un automóvil cuyo conductor no pudo hacer nada por esquivarlo.
El cuerpo municipal ha advertido este jueves de que la presencia de raposos en la ciudad no está siendo anecdótica. De hecho, a lo largo del año pasado el 092 tuvo que intervenir por varias llamadas en distintas parroquias, aunque también puntualmente en el casco urbano.
Entre esas actuaciones se encuentran la aparición de un zorro muerto -por causas aparentemente naturales- en el jardín de una casa de Coruxo, otro también fallecido en los vestuarios del campo de fútbol de San Paio y otros hallados sin vida en medio de la calzada en las zonas de A Madroa, Sobreira y en Ricardo Mella.
Otros avistamientos tuvieron lugar en García Barbón -observado por un vecino el día de Navidad-, en Saiáns -capturado y entregado al centro de recuperación de fauna- o Lavadores -atacando a las gallinas de un vecino-.
La Policía Local recuerda que también es habitual encontrar jabalíes en diferentes zonas de la ciudad. Suelen ser conductores o peatones los que alertan de su presencia de madrugada, a veces en manada, en As Roteas, Ricardo Mella, Matamá, las inmediaciones del campus universitario, la VG20 o incluso la AP9. Recientemente, uno provocó un accidente en la Estrada de Camposancos. De hecho, la parroquia de Coruxo es la que más acusa la presencia de estos animales.
