Este cierre siempre es supervisado por el personal del carrusel, que asegura que así lo hizo. No obstante, los empleados sostienen que, momentos después, la mujer quiso revisarlo personalmente y al mover la palanca que ajusta el cerrojo lo desenganchó involuntariamente.
Con todo, posteriormente esta versión fue corregida por el dueño de la empresa que gestiona esta atracción, que contradijo a sus empleados y asumió la culpa en última instancia al no haberse producido una comprobación del estado de las barras de seguridad, que se subieron solas con el movimiento haciendo que la víctima saliera despedida, golpeándose contra uno de los focos situados en torno a la atracción de feria. Además, al caer, se produjo una fractura en la pierna, que le obligará a pasar por el quirófano. Asimismo, su hijo sufrió heridas aunque de menor consideración.
Los trabajadores del ‘Saltamontes’ defienden que tienen toda la documentación de la máquina en regla y que el carrusel pasó la revisión obligatoria con éxito, tal y como explicaron a la policía, a la que aportaron todos los papeles solicitados.
Igualmente, esperan que los peritos, que acudirán este martes al lugar, aclaren todo lo sucedido. Contemplan que se levante el precinto lo antes posible, incluso a lo largo del día, para poder continuar con su actividad normal.
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