La investigación comenzó a principios del pasado mes de julio, cuando una mujer denunció que cuando accedía a su vivienda se le acercó había un hombre que se identificó como un sobrino al que hacía mucho tiempo que no veía, por lo que lo invitó a entrar.
Tras una breve conversación el supuesto sobrino le pidió 300 euros, negándose la víctima a darle el dinero, si bien ante la insistencia de este varón la mujer cogió un sobre con dinero y le entregó 200 euros, ocultando nuevamente el sobre.
Minutos más tarde ambos se despidieron, y cuando la víctima fue a recoger el sobre donde guardaba el dinero descubrió que este había desaparecido, así como los 5.000 euros que contenía su interior.
Después de una compleja labor, los agentes encargados del caso descubrieron que desde finales del pasado año se habían producido 15 hechos casi idénticos en diversos puntos de la geografía gallega.
Modus operandi
En todos ellos una persona bien vestida y con dotes de persuasión, abordaba a personas de avanzada edad en las proximidades de sus domicilio y se hacía pasar por un familiar, generalmente un sobrino lejano, y tras ganarse la confianza de la víctima accedía a su domicilio donde le pedía que le dejase ver las joyas para fotografiarlas y así poder encargar una idéntica para su madre, hermana o hija, aprovechando un despiste de la víctima para sustraérselas y abandonar rápidamente el domicilio con alguna excusa.
En otros casos en que la víctima era más confiada la convencían para que le prestase temporalmente joyas o dinero y al igual que en el caso anterior sustraían diversos efectos o dinero, en las idas o venidas de ésta,
desapareciendo a continuación del lugar.
Por todo ello se elaboró un dispositivo encaminado a la localización y detención de los responsables de los hechos, al tiempo que se seguían analizando las diferentes pruebas.
El avance de las investigaciones permitió a los agentes identificar a un varón como presunto responsable de los hechos, al tiempo que localizaban un vehículo en las inmediaciones de la Travesía de Vigo que podría estar siendo utilizado para sus desplazamientos.
Varios indicativos controlaron este vehículo de forma permanente, hasta que a última hora de la pasada mañana uno de ellos descubre a dos varones que se introdujeron en su interior e iniciaron la marcha.Tras avisar al resto de los indicativos comenzaron un seguimiento discreto a lo largo de diversas calles de la ciudad, el cual finalizó con la interceptación y bloqueo de este automóvil cuando intentaba acceder a la autopista por la calle Buenos Aires.
Después de identificar a los dos ocupantes los agentes comprobaron que uno de ellos disponía de dos identidades y nacionalidades diferentes, además de cinco órdenes de detención por diversos hechos, mientras que el otro ocupante tenía otras tres reclamaciones judiciales, por lo que procedieron a su detención y posterior traslado a dependencias policiales.
Una vez en Comisaría y tras realizas todas las comprobaciones se procedió a solicitar Autorización Judicial de Entrada y Registro en dos viviendas que estos varones tenían en Ponteareas y Vigo.
Joyas, dos vehículos de alta gama y 26.000 euros
Durante el registro, los agentes descubrieron diversas joyas, collares, pulseras y anillos, además de dos vehículos de prestigiosas marcas de alta gama, 26.000 euros en efectivo y otros efectos.
Es destacable el nivel de algunas joyas sustraídas como semanarios, cordones de oro, gargantillas, pendientes, rubíes, zafiros, etc., si bien entre todas ellas destacaba un broche de oro con incrustaciones de 70 diamantes.
Todo lo actuado a disposición del Juzgado de Instrucción número Cinco de los de Vigo en funciones de Guardia, siendo el Grupo de U.D.E.V.-1 perteneciente a la Brigada de Policía Judicial de esa Comisaría quien llevó el peso de la investigación.