Al llegar al lugar, una mujer que se encontraba llorando y con un fuerte estado de nerviosismo, acompañada de su hija de cinco años, relató a los efectivos movilizados que había tenido una discusión con su pareja porque no quería que él recogiera a la niña en el colegio estando borracho. Según afirmó, llevan más de un mes con problemas porque su marido consume drogas y alcohol.
Debido a ello, él reaccionó de forma violenta, agarrándola del cuello y diciéndole que no iría a ningún lado y que no le daría las llaves del coche.
La mujer aseguró que no era la primera vez que sucedían hechos similares y que en ocasiones se ha encontrado sola a su hija en casa cuando él estaba a cargo de su cuidado.
Los agentes observaron un hematoma en el brazo derecho de la víctima, que confesó que se produjo por una agresión de su marido el sábado pasado.
Así, el hombre, de 33 años, que se encontraba tumbado en una cama con síntomas de encontrarse bajo los efectos del alcohol, fue detenido.
Acoso en el trabajo
Posteriormente, ya por la noche, en torno a las 23.50 horas, la Policía Local arrestó a un hombre de 31 años en la calle Manuel de Castro tras recibir un aviso de un posible caso de violencia de género en el portal de un edificio.
En el lugar, los agentes pudieron observar en la calle a un hombre que tenía contra la pared de una fachada a una mujer a la que sujetaba fuertemente por los brazos en actitud amenazante.
Los policías procedieron a separarlos y tras ello la mujer contó a uno de los componentes de la patrulla que estaba saliendo con el hombre desde hace unas tres semanas y que ese día él se había presentado en su puesto de trabajo en estado ebrio para increparla, por lo que ella abandonó el lugar en su vehículo.
Sin embargo, poco después, cuando circulaba por la calle Coruña en sentido ascendente, pudo observar que su pareja caminaba por dicha calle y al reconocer el coche se abalanzó sobre él, comenzando a golpearlo. Con todo, ella logró esquivarlo para dirigirse a su domicilio.
A continuación, él se personó en su vivienda llamando de forma insistente a la puerta, por lo que ella, tras llamar a una amiga para comunicar lo que pasaba, bajó al portal, donde tuvo lugar una fuerte discusión y tras salir a la vía pública se produjo la agresión.
Tras la intervención policial la situación quedó controlada sin más incidencias y finalizó con la detención de dicho individuo.