Así, una patrulla se trasladó al lugar, donde les requirió una mujer que les contó que el novio de su hija se había levantado de la cama tras dormir en su domicilio y empezó a insultar y a sujetar por el cuello a la chica, también menor de edad. Ante este gesto, la madre se interpuso entre ambos, instante en el que supuestamente él aumentó su agresividad y comenzó a destrozar la vivienda.
Según relató, ambas aprovecharon para huir pero fueron alcanzadas por el presunto agresor en el descansillo de las escaleras. Ahí, nuevamente “empujó a su novia y al no lograr derribarla le propinó un cabezazo en la nariz”.
La agresión a la llegada de la dotación había cesado y la menor ratificó la versión de su madre. Según indicó, su pareja se había vuelto cada vez más agresivo y controlador en la relación. El sospechoso reconoció a los agentes “haber perdido los nervios” y asumió como cierto el episodio denunciado.
La patrulla, al aplicar el protocolo policial en estos casos, solicitó comprobación de datos personales del joven en la base informática y averiguó que además se encontraba fugado de un centro de menores.
Otro caso en A Salgueira
Además, ese mismo día, la Policía Local de Vigo tuvo que intervenir de madrugada por otro episodio de violencia de género en la zona de A Salgueira, donde una mujer denunció que la pareja de su compañera de piso había aparecido en la vivienda y se había llevado a su amiga a la fuerza a una habitación, donde comenzaron una fuerte discusión que acabó con golpes y gritos de auxilio de la joven.
La supuesta agredida contó a los efectivos desplazados que el motivo de la disputa fue que quería que su novio se fuese del piso. Los agentes observaron que la mujer presentaba varios moratones y un arañazo en la parte baja del ojo derecho, provocados según ella de forma accidental por su novio.
La patrulla la informó de qué pasos debía seguir para denunciar los hechos y procedió a la detención del hombre, un vecino de Vigo de 28 años, por un delito de violencia de género.