Así, una patrulla acudió al lugar y comprobó que la entrada, que había sido apalancada, daba acceso a un almacén de un supermercado, por lo que hablaron con la responsable de dicha empresa para determinar qué se habían llevado los ladrones.
Tras realizar una comprobación del interior y una primera valoración de los objetos sustraídos, los agentes dieron una batida por la zona y en la calle Doctor Cadaval observaron a un hombre con una mochila a la espalda y otra en el pecho que iba montado en bicicleta.
Como ya lo conocían de arrestos anteriores, le ordenaron que se detuviera. Con todo, según informa la Comisaría de Vigo-Redondela, el individuo se mostró esquivo, por lo que los agentes tuvieron que interceptarlo para evitar su huida. Inmediatamente, lo identificaron y le ordenaron que les mostrase el contenido de las mochilas, descubriendo en su interior varias botellas de licores que coincidían con las robadas hacía escasos minutos.
En ese instante solicitaron el apoyo de otra dotación para que se dirigiera a un edificio de la calle López de Neira, donde podía encontrarse su cómplice. A su llegada al inmueble, los policías comprobaron que la puerta del edificio tenía el bombín forzado y que en el hall interior había una mochila con ruedas con diversas herramientas en su interior, que podían ser las mismas con las que se habían forzado los accesos mencionados.
Al subir las escaleras los policías hallaron en el rellano de la escalera dos cajas con el logotipo del supermercado llenas de botellas de licor y a su lado una carretilla de mano metálica. Tras llamar a la puerta e identificarse, escucharon gritos de auxilio de una mujer que venían de la planta baja, por lo que acudieron en su ayuda.
Según el relato policial, al llegar esta persona les indicó que una persona acababa de saltar por la ventana desde las plantas superiores hasta su patio, «rompiéndose la pierna al impactar contra el suelo». A continuación, entró en su casa a través de la ventana mientras sangraba «abundantemente» por la pierna para luego huir por la puerta principal.
Los agentes comprobaron que había restos de sangre por el suelo que conducían a un portal cercano, donde se encontraron a un hombre que intentaba ocultarse. Tras identificarlo y solicitar una ambulancia, lo detuvieron y lo trasladaron al hospital.
Varios antecedentes
Ya en la comisaría se realizó una comprobación de las bases de datos policiales, en la cual se confirmó que los dos arrestados contaban con antecedentes, varios de ellos por hechos similares.
La detención fue llevada a cabo por agentes del Grupo de Atención al Ciudadano de la Brigada de Seguridad Ciudadana, pertenecientes a la Comisaría de Policía Nacional en Vigo-Redondela.