Los asaltos se registraron en los meses de junio y julio de este año y la Comisaría tuvo conocimiento de siete denuncias formulas por las victimas, según informó este martes la Policía Nacional en un comunicado.
Las denuncias coincidían en que los atacantes, menores de edad, solían actuar en grupo numeroso y utilizaban la fuerza, intimidando a las víctimas y llegando a ejercer la violencia física en algunas ocasiones, para sustraerles los objetos que portaban, tales como teléfonos móviles, dinero en efectivo o cualquier otra pertenencia.
La Comisaría de Policía Nacional en Vigo abrió, por medio del grupo especializado en delitos cometidos por menores «UFAM», perteneciente a la Policía Judicial, una investigación y alertó a las patrullas de Seguridad Ciudadana.
El pasado 19 de julio, una dotación pudo identificar a tres jóvenes con material que no pudieron justificar su procedencia. Uno de los identificados ya había sido detenido en el mes de mayo por un robo con violencia e intimidación.
Los menores portaban varios objetos que figuraban denunciados por robo en fechas anteriores, entre estos objetos se encontraban dos teléfonos móviles, una cartera, y varias tarjetas de crédito y documentación.
Revisadas las denuncias anteriores y ampliada la investigación, los investigadores consiguieron determinar que en todos los atracos colaboraban mas jóvenes, llegando en alguna ocasión a ser contabilizados en distinto grado de participación hasta unos diez menores.
Los asaltantes solían acorralar a las víctimas, casi siempre son menores, a los que inmovilizaban y mediante zancadillas derribaban, los cacheaban, buscando objetos del interés de los detenidos, principalmente teléfonos móviles, y esgrimían una navaja o propinaban puñetazos en distintas partes del cuerpo. En una de las agresiones una de las victimas sufrió lesiones en la nariz, de las que tuvo que ser asistido, quedando ingresada y necesitando intervención quirúrgica en un centro hospitalario de Vigo.
Uno de los imputados se encontraba fugado de un centro de menores de la provincia, por lo que hasta este martes no se pudo proceder a su localización y detención.
Parte de los objetos sustraídos fueron devueltos a sus legítimos dueños, entre ellos una motocicleta, varios teléfonos móviles, distintas cantidades de dinero, documentación y tarjetas bancarias.
Además, se pudieron identificar a otros seis jóvenes menores de edad, que de una u otra manera habían participado en menor medida en los delitos descritos, por lo que fueron citados con sus progenitores, a los que se les informó de los hechos. De todas las actuaciones se dio conocimiento a la Fiscalía de Menores de Pontevedra.