Así pues, la policía reunió la información necesaria para pasarla a su vez a la patrullas de servicio, como datos vehículo con el que se pudo ausentar así como algún indicio o idea de a dónde podía dirigirse.
No obstante, media hora más tarde de recibir el comunicado, se recibió otra indicación advirtiendo de que los allegados del sexagenario ya lo habían localizado y que se encontraba sano y salvo.
Según explicaron, se había quedado encerrado en el montacargas de una zona industrial, donde se alquilan trasteros. Sus hijos habían acudido a ese lugar ante la sospecha de que pudiera haberse dirigido allí.
Al llegar, vieron que su coche estaba en las instalaciones, por lo que recorrieron la zona hasta escuchar los golpes en uno de los montacargas. Tras contactar con el servicio técnico, el hombre pudo ser rescatado.