La ciudad de Vigo tiene el privilegio de disponer del Instituto Camoês, el Centro Cultural Portugués ubicado en la llamada Casa de Arines, en la Praza de Almeida, en el Casco Vello.
El centenario e histórico caserón que alberga el Instituto Camoês, conocido como Casa de Arines, está formado por el conjunto de las casas de Ceta y de Pazos y Figueroa. Resulta de una belleza singular tanto en su exterior como en el interior, aunque la mayoría de la gente desconoce los tesoros que encierra tras sus gruesas paredes, combinando piedra, madera y hierro con una enorme y muy bien equilibrada sencillez. Destacando que la Casa de Ceta, de estilo gótico tardío, es el edificio más antiguo de la ciudad de Vigo, un palacete del siglo XV.
El Instituto Camoês es el equivalente al Instituto Cervantes español, que existe en muchos países del mundo y que se encarga de divulgar el idioma español y su cultura. En el caso del centro portugués la dinámica es similar, difundiendo el idioma portugués y la cultura del país hermano.
Las actividades son muy numerosas a lo largo del año, desde cursos de portugués con distintos niveles hasta exposiciones, conferencias y grupos de teatro, destacando una excepcional biblioteca de uso público y de temas portugueses que aún resulta una gran desconocida.
Remodelación
La remodelación arquitectónica del edificio, llevada a cabo durante los años noventa del pasado siglo XX por el arquitecto Alfonso Penela, ha sabido conservar elementos estructurales de enorme importancia que pueden apreciarse en las fotografías, combinando la madera, el hierro y la piedra vista, e incluso en algunos rincones destacan restos arqueológicos descubiertos junto a la cimentación. Pero una de las cosas que llama poderosamente la atención es la cúpula de la biblioteca, donde también existe un bellísimo “parladoiro” que puede apreciarse en una de las fotografías.
En la página web del Instituto Camoês puede consultarse el amplio abanico de actividades que organiza la institución a lo largo de todo el año, una labor intensa que va dando sus frutos a este lado de la frontera, intensificando los lazos que nos unen con el país hermano.
