Pero lo más duro estaba por llegar. Los termómetros fueron subiendo hasta alcanzar exactamente los 34,34 grados. Así pues, las playas se llenaron de bañistas en busca de un chapuzón y de la suavidad que siempre aporta el mar.
No pudieron decir lo mismo en localidades como Arbo, donde no sólo se soportó la máxima de Galicia, con nada más y nada menos que 42,9 grados, sino que esta cifra es la más alta nunca registrada en la comunidad. La anterior databa de 1990, cuando Ourense llegó a los 42,6 grados.
Desde el portal meteorológico 4 Gotas aclaran que la comparativa es complicada porque la estación que hay en la localidad de A Paradanta sólo tiene estadísticas de temperaturas desde 2002 y es posible que, de existir en 1990, hubiera ofrecido entonces un dato mayor. En cualquier caso, se puede decir que el registro conocido este jueves es el más elevado de todos los existentes.
El calor no cesará en toda la semana y se prevé que este viernes suba un poco en intensidad. Meteogalicia pronostica 38 grados en Vigo y una mínima de 23 grados, la misma que hubo esta pasada noche en la ciudad olívica.