El Consello de la Gerencia Municipal de Urbanismo de Vigo ha dictaminado este viernes favorablemente el documento del nuevo Plan General de Ordenación Municipal (PXOM), con los votos favorables del PSOE, la abstención del PP y el rechazo del BNG.
Este trámite es el paso previo al debate en pleno del documento, una sesión que el alcalde, Abel Caballero, anunció para la próxima semana, pero todavía no se ha fijado fecha.
En declaraciones remitidas a los medios, el regidor ha señalado que, en la Gerencia de Urbanismo, ha ocurrido «lo que está pasando desde hace tanto tiempo», en alusión a las posiciones de ‘populares’ y nacionalistas’.
«De la ciudad tira la ciudad, con el gobierno local a su lado, pero no contemos ni con el PP ni con el BNG», ha proclamado, tras recordar que el nuevo planeamiento prevé 50.000 viviendas (14.000 de ellas protegidas), espacios para dotaciones y zonas verdes.
PXOM «mejorable, pero necesario»
Por su parte, el PP ha defendido su «abstención responsable» ya que el nuevo PGOM «es mejorable, pero necesario». Al respecto, Luisa Sánchez ha señalado que, en estos momentos, «hay que tener sentido de ciudad» para evitar «paralizar» la ciudad.
Con todo, ha matizado que el PGOM que defiende el PSOE es «poco ambicioso» y «nace cojo». En ese sentido, ha criticado que «limita la propiedad privada y la iniciativa empresarial», recoge una expectativa de crecimiento poblacional «totalmente irreal», contiene «actuaciones polémicas» y olvida la solución para las zonas inundables, entre otras carencias.
Además, Luisa Sánchez ha censurado que el nuevo Plan se elaboró «de espaladas a la ciudad», con «falta de diálogo y transparencia», y ha remarcado que, de hecho, este viernes la concejal de Urbanismo «descartó convocar el Consello Social» de la ciudad para que se pronuncie sobre el documento. A ello se suma el hecho de que los grupos todavía no conocen la fecha exacta del pleno de aprobación definitiva.
«Tramitación antidemocrática»
Por su parte, el BNG también ha exigido la convocatoria del Consello Social y ha censurado la «tramitación antidemocrática» del PGOM, de forma «absolutamente opaca y sorda» por parte del gobierno de Abel Caballero.
El portavoz del grupo nacionalista, Xabier Pérez Igrexas, ha acusado al gobierno municipal de actuar con «rodillo absolutista» para imponer un modelo de ciudad para los próximos años «sin diálogo con el tejido asociativo ni con las principales entidades de la ciudad».
El edil del BNG ha advertido de que «estamos ante una estafa antidemocrática» pero también ante hechos que «pueden poner en jaque la viabilida a nivel legal del nuevo PGOM». Así, ha recordado que el gobierno local «ignoró» más de 4.500 alegaciones vecinales e introdujo «cambios sustanciales» en el documento, entre ellos «la legalización de los chalés VIP de Cabo Estai» o la «destrucción de la ‘carballeira’ de A Barroca para construir el Vigo Arena».
Pérez Igrexas ha alertado contra la «evidente inseguridad jurídica» del nuevo Plan (que sustituirá al PGOM de 2008, anulado por el Tribunal Supremo) y ha apostado, frente a este modelo «gris de cemento y asfalto», por un Vigo que vertebre barrios y parroquias, que no castigue a la periferia, y que preserve los pulmones verdes ante proyectos irracionales como la nueva A-52 o la PO-010, en definitiva «un urbanismo al servicio de los vecinos y del interés general», y no de «los poderosos intereses de los de siempre».