Numerosos curiosos se acercaron ayer hasta la rotonda para inmortalizar a su nuevo inquilino, un olivo centenario de gran porte bautizado como «Balanza» que se suma a los cientos de ejemplares de esta especie que se han colocado en la ciudad tras las distintas humanizaciones. A escasos metros, no obstante, se puede observar una pequeña muestra de lo que pudo haber estado en la glorieta ya que no se han retirado unos originales arbustos con forma de palmeras que decoran una de las aceras de la humanizada Rosalía de Castro.
El seto con forma de dinosaurio, cuyo próximo destino será el parque de Navia, descansa por ahora aunque sus «seguidores» ya han creado en Facebook dos páginas dedicadas a su breve estancia en la rotonda de Rosalía de Castro. Ya en los últimos días se han creado numerosos memes en las redes sociales e incluso han creado una petición en la plataforma Change.org para reclamar que el T-rex vuelva a su morada original.