Lo ha logrado con la presentación en el juzgado de un informe de vulnerabilidad por tener tres hijos menores de edad a su cargo. Además, había un defecto de forma en la demanda de desahucio que también contribuyó a frenar este lanzamiento.
Margia González y su marido pidieron cita con los Servicios Sociales del Concello de Vigo para solicitar ayuda de cara a este desahucio, fechado para el 24 de mañana, pero les dijeron que no podían atenderles antes del día 30 de este mes. Así que, «desesperados», acudieron a la Federación de Vecinos “Eduardo Chao” para pedir ayuda y evitar esta salida inminente “porque no tienen donde ir y nadie les quiere alquilar un piso, los alquileres están por las nubes y ellos no pueden pagarlo”, explica María Pérez, presidenta de la Favec.
Partida para Servicios Sociales
Pérez espera que, conseguida la paralización, los Servicios Sociales del Concello den una solución a esta familia en la cita del próximo 30 de enero, “como es su deber”, en lugar de dedicarse a “desacreditar a este matrimonio públicamente para justificar la ineficacia y la poca sensibilidad de Benestar Social”, en alusión a las críticas de la concelleira Isaura Abelairas el mismo día en que se dio a conocer este caso en los medios de comunicación.
La Federación reclama al Concello más inversión y más eficacia en el tratamiento de este tipo de casos y que ponga a disposición de las familias todas herramientas y viviendas destinadas a paliar el “grave problema de pobreza que sufre la ciudad de Vigo y de la que el gobierno local hace caso omiso, mientras otras entidades sin ánimo de lucro se ven obligadas a atender a cambio de insultos y humillaciones por parte de los dirigentes políticos del consistorio”, lamenta María.