La ola de calor continúa azotando Ourense, conocido coloquialmente como el «horno» o «la sartén» de Galicia por sus ya habituales temperaturas extremas en verano. Aunque aún quedan unos días para dar comienzo a la estación y que los termómetros se disparen por encima de los 40 grados, las piscinas, el río e incluso las termas se llenan de decenas de bañistas que buscan un lugar donde refrescarse.
Quizás lo más curioso es que, a pesar del calor, hay quienes prefieran darse un baño termal a 33 grados. Las Termas de A Chavasqueira tienen su público fiel, que asegura que «aquí se está mejor que en Vigo» y bromean con que «este calor no es nada». Entre poza y poza, los bañistas explican que hacen contraste, entre el agua de las termas y el río, situado al lado. Asimismo, afirman que «el agua se enfría un poco, no está como en invierno».
Asimismo, preguntados por Europa Press, expresan que no solo acuden a darse un baño. «Hay muchos que venimos para socializar y pasar la tarde, tomar el sol en compañía. Algunos somos viudas, separados o vivimos solos y aquí nos juntamos cada día», ha explicado una de las bañistas.
Otros, en cambio, agazapados en la sombra de las piscinas de Oira, se refugian de otra tarde calurosa de junio y allí confirman que «siempre fue así», aunque admiten que «quizás estos últimos años hace un calor más de lo normal para esta temporada». Eso sí, han encontrado solución: «Tenemos río, piscina y el mar a una hora».
«A nuestra edad –con el calor– no hay grandes problemas. Entiendo más a las personas con problemas respiratorios, personas mayores y niños pequeños», ha expresado una de las personas consultadas por Europa Press.
También por las mañanas, la temperatura dificulta las actividades deportivas. «O se madruga o no se hace», traslada un deportista de la ciudad, que propone como alternativa «estar al ‘fresquiño’ resguardados del sol» y «si es posible con una cerveza».
En este contexto, dos jóvenes a los pies del Puente Romano, uno de los lugares favoritos de los habitantes para bañarse en el Miño, sentencian que «el único plan viable ahora mismo es ir al río y a la piscina». «Nosotras vinimos el lunes, estuvimos muy bien y ahora repetimos», añaden.