Un grupo de orcas ha protagonizado un nuevo incidente en aguas gallegas al interactuar con el velero Avila, de bandera alemana, dejándolo sin gobierno a dos millas de la Costa de la Vela, al norte de las islas Cíes. El suceso, ocurrido esta misma tarde (21 de agosto), pone de manifiesto el creciente fenómeno de interacciones entre estos cetáceos y embarcaciones en la costa atlántica.
Un aviso de emergencia en el canal 16
A las 17:06 horas, el canal 16 de VHF recibió una señal de auxilio desde el velero Avila, alertando de una interacción con un grupo de orcas al norte de las Islas Cíes. Según el mensaje, la embarcación, que navegaba en la Costa de la Vela, a unas dos millas náuticas de la costa viguesa, quedó sin capacidad de maniobra tras los impactos de los cetáceos. Este tipo de encuentros, aunque no considerados ataques agresivos por los expertos, suelen provocar daños en el timón o el casco, dejando a los barcos a la deriva.
La tripulación, compuesta por dos adultos, reportó la situación con calma, pero la pérdida de gobierno del velero requirió una respuesta inmediata. Este incidente se suma a una serie de interacciones similares registradas en la costa gallega.
Rescate coordinado en alta mar
El Centro de Coordinación de Salvamento Marítimo reaccionó con rapidez, activando un operativo en el que colaboraron la Guardia Civil y la embarcación Salvamar Mirach, con base en Cangas. El buque de salvamento se desplazó hasta la posición del Avila para asistir a la tripulación y remolcar la embarcación. Actualmente, el velero está siendo trasladado al Club Náutico de Vigo, donde se evaluarán los daños sufridos, principalmente en el sistema de gobierno.
A pesar de la tensión del momento, los dos ocupantes del Avila se encuentran en perfectas condiciones, sin lesiones ni necesidad de asistencia médica, según confirmaron fuentes de Salvamento Marítimo. La operación de rescate, coordinada con eficacia, evitó que el incidente derivara en consecuencias más graves.
Las orcas y su comportamiento enigmático
Las interacciones de orcas con veleros, como la sufrida por el Avila, son un fenómeno que intriga a biólogos y navegantes. Según el Grupo de Trabajo Orca Atlántica (GTOA), estas interacciones, que han superado las 670 desde 2020, no son ataques intencionados, sino comportamientos relacionados con la curiosidad o el juego, especialmente entre orcas juveniles. Los cetáceos suelen centrarse en el timón, probablemente atraídos por su movimiento o sonidos, lo que puede provocar averías graves, como la rotura del timón o vías de agua.
El Ministerio para la Transición Ecológica y el GTOA recomiendan a los navegantes, en caso de encuentro, no detener la embarcación, navegar hacia aguas menos profundas y evitar tocar el timón para minimizar riesgos. También se pide notificar cualquier interacción al correo orcas@sasemar.es para mejorar el seguimiento de esta población vulnerable, protegida por el Catálogo Español de Especies Amenazadas. En Galicia, los encuentros son más frecuentes entre abril y agosto, coincidiendo con la migración de las orcas en busca de atún rojo.
Un llamamiento a la prudencia en el mar
Este incidente resalta la necesidad de una mayor coordinación entre navegantes, autoridades marítimas y científicos para gestionar estas interacciones. Mientras tanto, los navegantes que surquen las costas gallegas deben extremar las precauciones, especialmente en zonas como las islas Cíes, donde los avistamientos son recurrentes.