Las viviendas que la Xunta de Galicia ha proyectado construir en Navia, cuando estén terminadas, cubrirán únicamente el 20 por ciento de la demanda de vivienda pública que existe actualmente en Vigo y la oferta de 67 viviendas que proyecta poner en alquiler el Gobierno central con su programa Casa 47 es «ridícula» para una ciudad donde los demandantes son más de 7.000.
Es decir, Vigo tiene un problema gigantesco con la vivienda que ninguna de las administraciones ha querido afrontar en años, tampoco el Gobierno local, cuyo alcalde, Abel Caballero, prometió la construcción de 6.000 viviendas en 2007 y de momento no ha hecho ni una sola. Además, «casi seis meses después de ser anunciada y prometida, la Empresa Municipal de Vivienda no va a estar constituida antes de que finalice este año 2025«.
Así lo ha recordado este lunes el BNG de Vigo, partido que ha recordado que «los alquileres en Vigo siguen marcando récords históricos y después de
acumular una subida del 7,4% en el año pasado, el próximo de 2026 superará con toda seguridad los 700 euros mensuales de media», lo que supone un incremento del precio de casi el 41 por ciento en seis años. Es decir, el precio del alquiler ha subido casi 20 puntos más de lo que subieron los salarios desde el año 2019, antes de la pandemia.
Emergencia habitacional
«Estos datos vuelven a evidenciar el alcance de la situación de emergencia habitacional que padece la mayor ciudad de Galicia, agravada por el desmantelamiento de la política de vivienda pública por parte de la Xunta del Partido Popular, pero también por la inacción del Gobierno Municipal
de Abel Caballero», ha dicho el portavoz de los nacionalistas, Xabier Pérez Igrexas.
«Alquileres a precios imposibles para la mayoría social, y cada vez menos oferta de vivienda para alquiler por causa del avance de los pisos turísticos, que en los últimos tres años sumaron 2.000 nuevas viviendas de uso turístico en Vigo», ha añadido antes de recordar que a todo lo anterior hay que sumar las dificultades cada vez mayores que imponen los caseros a sus potenciales inquilinos: avales, seguros y nóminas muy por encima del salario mínimo.
Absolutamente desolador
Así es como ha calificado Pérez Igrexas la situación en Vigo: «Es una tomadura de pelo para las familias trabajadoras que se ven expulsadas de la ciudad por causa de no lograr una vivienda. O para los miles de jóvenes para los que emanciparse en Vigo es un lujo imposible«, ha dicho.
El BNG señala directamente a Abel Caballero y le afean de que «presuma de la promesa de viviendas de apenas 75 metros cuadrados que costarán 660 euros al mes. ¿Para quién es accesible un piso a más de 600 euros al mes?«, se ha preguntado Pérez Igrexas.
Es por ello que los nacionalistas, además de denunciar «la absoluta inacción y parálisis» del Gobierno municipal, van a exigir que se agilice al máximo la creación de la Empresa Municipal de Vivienda, «un instrumento que se ha llegado tarde, demasiado tarde», para que el Concello comience a desplegar políticas para facilitar el acceso a vivienda, y que seguirán recordando que el pleno de marzo de 2024 aprobó otras medidas concretas, como la de iniciar la solicitud para declarar Vigo como zona tensionada del mercado de vivienda, de lo que nada se sabe aún.
























