Los más nostálgicos de las noches y tardes vividas entre las paredes del Teatro Cine Fraga y de la emblemática discoteca Nova Olimpia tienen una nueva oportunidad de maravillarse con sus interiores 24 años después de que sus puertas se cerrasen al público. Se hizo para iniciar una obra que, finalmente, quedó inacabada en el año 2010, dejando así uno de los puntos de encuentro y ocio de jóvenes y mayores completamente abandonado.
Ahora, y aunque de forma parcial, todos los vigueses y viguesas que así lo deseen pueden volver a pisar y recorrer el vetusto inmueble gracias a las visitas guiadas que, de forma paralela a la redacción del proyecto -que continuará el afamado arquitecto César Portela-, ya llevan a cabo desde la Xunta y la Diputación de Pontevedra tras haber adquirido el edificio para continuar con la recuperación de uno de los bienes más preciados por todos los vigueses y viguesas con el objetivo de convertirlo en un nuevo emblema cultural de toda Galicia.
Este miércoles, el primer grupo de visitantes cruzó las puertas del Fraga, quedándose muchos de ellos con la boca abierta. En un principio, durante este mes de octubre, estas visitas están reservadas para aquellas personas que participaron en el proceso participativo de ‘El mejor espacio busca el mejor contenido’, la campaña en la que a través de encuentros presenciales y un buzón virtual se recopilaron ideas, aportaciones y propuestas de la ciudadanía para enriquecer el plan de usos.
A partir del mes de noviembre, están abiertas al público en general pero ya hay lista de espera, siendo la última cita reservada para el 6 de abril del año 2026, como bien informó este miércoles la vicepresidenta de la Diputación, Luisa Sánchez. «Esto es lo que estaba esperando la ciudad», subrayó la responsable provincial.
Miembros del Instituto de Estudios Vigueses, de la Federación Vecinal ‘Eduardo Chao’ o de la Asociación Casco Vello Centenario 1923, entre otros, formaron parte del primer grupo que, acompañados por el conselleiro de Cultura, José López Campos, y de la vicepresidenta de la Diputación, Luisa Sánchez, recorrieron y conocieron detalles del que será el nuevo «icono» de la cultura gallega.
En este grupo había tres personas de excepción y familiares directos de Isaac Fraga: dos nietos y un bisnieto que, claramente emocionados, volvieron a entrar en la que era su «casa». Marisen y Carlos Costa Fraga, sus nietos, vivieron «con mucha emoción» este recorrido a su infancia como una «vuelta a mi casa».
«Brillar con luz propia»
Con todo, el titular de Cultura de la Xunta destacó el hecho de «poner en valor» las visitas y lo que se «permitirá conocer» sobre el estado actual del Teatro Fraga pero también, matizó, «por echar la vista atrás y ver de donde venimos», señaló, calificando de «icono» no solo urbanístico sino también en el plano «sentimental» lo que implica la recuperación y nueva apertura del Fraga. «Todo el mundo en alguna parte de su vida pasó por aquí», dijo.
López Campos recordó que en estos momentos el equipo de arquitectura de César Portela está manos a la obra para ultimar el proyecto con el que se rematará la actuación y que su idea pasa por licitar la obra en los primeros meses del año 2026.
Por su parte, Luisa Sánchez, destacó la apuesta que hicieron tanto Xunta como Diputación por actuar en el histórico inmueble. «Podíamos mirar el edificio y no hacer nada o recuperarlo. Nos pusimos manos a la obra y lo abrimos a la ciudad 24 años después», relató, al tiempo que puso el foco en que tiene que «brillar con luz propia». «Hoy es el primer estreno del futuro o la última visita del pasado, sin palomitas», consideró claramente emocionada.
Además, tuvo palabras para los nietos de Fraga, presentes en la visita. «Tiene una connotación muy importante», dijo. «En aquella época se daba a luz en las casas. Es un reencuentro con el pasado y muchas emociones a flor de piel», concluyó.
Con todo, ambos dirigentes coincidieron en señalar que la obra del Teatro Fraga servirá para «proyectar el pasado, presente y futuro» dando así respuesta a una «reclamación colectiva de la sociedad»
El programa de visitas supone realizar paradas en cuatro espacios del inmueble, donde los visitantes, acompañados por un guía titulado, pueden ahondar en la historia y detalles de este edificio de más de 7.000 metros cuadrados incluido en el Patrimonio Cultural de Galicia e ideado hace más de 80 años por encargo de Isaac Fraga Penedo.