Dicha modificación, explica Fidalgo, no hace sino confirmar lo que viene denunciando desde el principio de este proceso el Partido Popular: la necesidad de sacar a concurso un nuevo contrato que refleje las necesidades reales de la ciudad.
“Lo decíamos desde el PP, y lo decían los trabajadores. Hay que hacer un nuevo concurso, porque el pliego actual se elaboró durante los años 2013 y 2014, y no tiene nada que ver con la realidad actual de las zonas verdes de Vigo”, incide Fidalgo.
En este sentido, el edil popular ha apuntado que a día de hoy la ciudad tiene, por ejemplo, más medianeras, existe más arbolado, o se han caído otras partes del contrato como el mantenimiento del césped de Balaídos. Una realidad que, sin embargo, parece querer “ignorar el desgobierno municipal, con lo que esto supone de gasto para los bolsillos de los vigueses”.
Sobre esta base, Fidalgo Iglesias sostiene que “lo único que ha hecho Caballero durante todo este tiempo es una chapuza”. No en vano, y como también ha recordado, a la concesión original se añadieron cuatro contratos para atender las medianeras y jardineras de las nuevas humanizaciones, un contrato para el Castro, y otro para Castrelos, ninguno de ellos contemplado inicialmente. “Y ahora, con sólo un mes de trabajo de la nueva empresa concesionaria, nos encontramos con otra modificación del contrato”, señala.
Una empresa, incide, que fue excluida inicialmente por baja temeraria. “No sé a quién pretende engañar el alcalde de Vigo cuando cambia una empresa que estaba realizando un pésimo servicio en el mantenimiento de las zonas verdes por una empresa a la que se le va a pagar aún menos. Una empresa que hizo una oferta aún más barata”, ha incidido Fidalgo.
En definitiva, expone Fidalgo, la gestión de este contrato de zonas verdes es una muestra más de la “improvisación y el despropósito del alcalde”, que tiene los parques y jardines de Vigo en un “estado deplorable”. “Caballero nos demuestra día a día que está en caída libre, que se le agota la gasolina, y por este motivo se muestra tan nervioso y hace cosas muy raras, como vemos con este contrato o con los comentarios que realiza sobre el transporte metropolitano”, ha concluido.