Los datos, a raíz de muestras tomadas este martes y este miércoles, arrojan niveles de hierro y aluminio en los tres centros de enseñanza que oscilan entre los 200 y los 380 partes por billón (ppb), cuando los niveles máximos permitidos se encuentran en 600 ppb en el caso del hierro y en 1.000 ppb en el caso del aluminio.
El alcalde de Vigo, Abel Caballero, ha dado a conocer estas cifras y se ha basado en ellas para mantener que se trata de “agua perfectamente potable”. Incluso ha asegurado que el suministro parte de la potabilizadora con cantidades inferiores a 200 ppb.
Por ello, nuevamente ha exigido a la Consellería de Educación que revise el estado de las cañerías de estos tres colegios, ya que, según sostiene, el agua que sale por los grifos es de peor calidad que la que entra en los centros. Igualmente, informó de que el consistorio ya ha enviado el informe relativo al Ría de Vigo, que fue publicado este miércoles. “Están en muy mal estado”, declaró.
Acusaciones políticas
El regidor vigués se amparó en “datos científicos” y “homologados” y arremetió duramente contra el conselleiro de Educación, Román Rodríguez, por “sembrar la alarma” con este tema sin “ninguna base objetiva”.
“Ayer [por este miércoles] tenían estos análisis y por tanto sabían que el agua es perfectamente potable. ¿Saben qué sucede? Que quieren sembrar alarma en Vigo”, afirmó Caballero.
“¡Qué escándalo es esto! ¡Con qué criterio científico opinaba el conselleiro de Educación!”, exclamó el alcalde, que reclamó “una explicación” por parte de Rodríguez y del presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, por “usar la alarma social como arma política”. “Están mintiendo y calumniando. Han intentado dañar la imagen de Vigo”, añadió.