Será la antesala del buen clima que dejará un anticiclón el fin de semana. Su llegada favorecerá la ausencia de nubes y un nuevo ascenso térmico, hasta los 26 grados, durante el sábado y el domingo. Días, pues, propicios para que las playas de Vigo vuelvan a recibir un desembarco de bañistas.
Además, la estabilidad, según el pronóstico a medio plazo que ofrecen a día de hoy los diferentes servicios meteorológicos, viene para quedarse. La ciudad disfrutará de este calor primaveral y casi veraniego al menos hasta el miércoles, manteniendo siempre el termómetro por encima de los 23 grados.