Descanse en paz, que en paz descanse, ‘requiescat in pace’ o RIP. Todos ellos sinónimos que utilizamos como último deseo para aquellos que nos han dejado. Pero el descanso también tiene sus límites y, por supuesto, el espacio y el dinero son algunos de ellos. Y es que en el mayor cementerio de Vigo ha llegado el momento de dejar sitio a los que llegarán. El Concello de Vigo ha lanzado un ultimátum para que los familiares de 169 fallecidos retiren los restos y objetos de otras tantas tumbas del camposanto de Pereiró.
El motivo no es otro que la caducidad de la concesión de la sepulturas en el cementerio vigués. Así figura en el anuncio publicado este miércoles en la plataforma digital de la administración municipal. Da un plazo de un mes a los propietarios. En el caso de que no sean retiraros los restos mortuarios y los objetos acabarán en el osario general.
Plazo de un mes
«Por ter caducada a concesión das sepulturas da zona décimo segunda do cemiterio municipal de Pereiró, faise saber ás persoas interesadas que no prazo de un mes a contar desde a publicación deste anuncio, deberán proceder ao levantamento das cinzas e á retirada dos obxectos da súa pertenza, xa que o transcorrer o devandito prazo, sen máis aviso, depositaranse no osario xeral». Así reza el aviso.
Tasas municipales
Los nichos municipales se regulan en régimen de concesión. En el caso de Vigo, la tasa por 50 años es de 2.304 euros. También se puede solicitar por un periodo de 6 años y al acabar pedir una renovación por 4 años. Además del nicho, se puede solicitar igualmente por 6 años -con renovación de 4 años-.
Osario general
Tal y como avisa el Concello, si en el plazo de un mes no retiran los restos acabarán en el osario general. Se trata de un gran sarcófago de piedra del que solo se pueden retirar huesos para estudios de medicina.
